La Real saca pecho con Zubieta

La Real Sociedad aprovecha las horas previas al que, a día de hoy, es su gran partido del año para sacar pecho de las bondades que está ofreciendo su prolífica cantera en los últimos años. El dato es realmente revelado. Son 27 los jugadores forjados en Zubieta que forman parte de la actual estructural profesional los que han llegado a debutar con el primer equipo. Fiel reflejo de la apuesta por la cantera en el club donostiarra, y lo más importante del buen trabajo que se hace en sus instalaciones, y por ende en el fútbol guipuzcoano.

De esos 27 futbolistas, doce pertenecen al primer equipo, dos están cedidos y los trece restantes militan en el equipo filial, en Segunda. Como bien señala el club realista en su nota de prensa, “son estrenos especiales todos ellos, llenos de ilusión y sentimiento de pertenencia al club de su vida”. La Real lo que hace es intentar dar la oportunidad a todos sus futbolistas, son oportunidades que están ahí, y estos 27 jugadores las han aprovechado, dando continuidad a una forma de ser y hacer, la que se trabaja a diario en Zubieta. El último de esos jóvenes canteranos en alcanzar el primer equipo ha sido el lateral izquierdo Ander Martin, que se estrenó en Leipzig y repitió en San Mamés. “Lo viví con mucha ilusión, fue muy poco tiempo el que estuvo en el campo, pero lo viví muy feliz. Todos los momentos malos pasados se compensan con ese instante”, semana Ander Martin.

El club ha aprovechado la ocasión para recordar con esos 27 jugadores sus primeros momentos con la camiseta del primer equipo de la Real Sociedad, convirtiéndose en un carrusel de sensaciones que dibuja perfectamente la ilusión con la que se afronta en Zubieta cada debut de un canterano en el fútbol de élite. “Es un día con el que sueñas y que recordarás toda la vida”, explica el capitán Asier Illarramendi, el más veterano de esta lista. Debutó un 23 de enero de 2011 en el campo del Villarreal. Han pasado 11 años de aquel momento. El siguiente jugador más veterano es el lateral derecho Joseba Zaldua. “El momento más bonito que he vivido en el fútbol”, dice el donostiarra, que debutó un 23 de noviembre de 2013 con el primer equipo. “Es un día que no puedes olvidar nunca. Llegarán otros, pero como ese ninguno”, añade Aritz Elustondo, que se estrenó con la Real hace siete años, un 14 de enero de 2015. Le siguió la joya de la corona en la actualidad, Mikel Oyarzabal, el canterano de Zubieta que más está brillando en la última década. “Fue un día especial, queda para toda la vida”, dice de su debut un 25 de octubre de 2015, con Moyes en el banquillo.

A partir de ahí llegó el turno de Jon Bautista, cedido en la actualidad en el Leganés; y de Igor Zubeldia. Ambos de la misma generación. “Lo tengo guardado para siempre. Es un orgullo defender estos colores”, señala el azkoitiarra. Junto a ellos se estrenó Jon Guridi, de la famosa generación del 97 que llegó a jugar la Youth League al coincidir con el último año hasta ahora en Champions League. Más tarde sería el turno de Andoni Gorosabel, lateral derecho asentado en el primer equipo. Su caso es peculiar porque parecía que no iba a llegar a Primera cuando fue cedido al Real Unión, pero le vino muy bien, porque regresó más formado. “Aquel momento fue una recompensa a todo el trabajo realizado, y a todo lo que se ha pasado hasta llegar hasta aquí”. Debutó el 21 de septiembre de 2017 en el Ciutat de València.

En el centro de campo, en poco tiempo debutaron Ander Guevara, desde el año pasado con sitio fijo en el primer equipo; y un Luca Sangalli que ha tenido que superar hasta un ictus para poder disfrutar en la élite. Ahora pelea en Segunda como el referente del filial de Xabi Alonso. “Para todo guipuzcoano es el sueño de todos, poder debutar con la Real”, señala. Amigo de Sangalli es Martin Merquelanz, que tuvo el estreno más agrio de todos. Debutó en Ipurua como jugador de la Real, y al minuto de saltar al terreno de juego, se rompió la rodilla. “Fue un estreno agridulce, pero muy especial”, recuerda el irundarra.

Inesperados fueron los estrenos en el Benito Villamarín de la mano de Asier Garitano de Robin Le Normand, que hoy en día es el muro de la defensa de la Real Sociedad, y Aihen Muñoz en el lateral zurdo en la victoria 0-2 en el Santiago Bernabéu contra el Real Madrid en el estreno de Imanol Alguacil. “Me dio mucha fuerza para seguir trabajando” dice el navarro que ha renovado este año si contrato con la Real. Ander Barrenetxea debutó contra el Alavés el 21 de diciembre de 2018, convirtiéndose en el primer jugador nacido en el siglo XXI en estrenarse con la Real. “Debutar en el equipo de tu ciudad y de tu vida es inolvidable”. En la misma línea se expresa Alex Sola, que tras una grave lesión bucle a dar guerra en el filial realista. “Mi familia, mi club, mi ciudad mi casa, mi todo”, dice de su fulgurante debut. El maño Roberto López tuvo que volver al Filis para reforzarlo en su regreso a Segunda, pero antes logró estar un año entero en el primer equipo.

Uno de los estrenos más especiales de los últimos años fue el de Martin Zubimendi. Llegó tras el confinamiento, por las muchas lesiones que sufría el primer equipo. Se asentó enseguida, en un crecimiento imparable para hacerse con el centro de campo de la Real. Aprovechó su oportunidad. “La Real te va a dar la oportunidad, sabes que cuentan contigo”, señala. Y los más recientes en llegar al primer equipo han sido Urko González de Zarate, Aritz Arambarri, Djouahra, Robert Navarro y Jon Pacheco, que siguen a caballo del primer y segundo equipo. Y esta temporada han completado esta lista Julen Lobete, Jon Ander Olasagasti, Beñat Turrientes, Jon Karrikaburu y con el que comenzábamos esta historia, Ander Martin. Los cinco están llamados a liderar la Real del futuro, que seguirá estando basada, por supuesto, en su cantera, en ese ímprobo trabajo que hacen muchas personas en Zubieta.