El agente de Okay: "El Celta no es un club fácil para negociar"
El representante del pivote también lamenta que Coudet "prefiere jugar siempre con doce o trece jugadores". La opción de compra del Getafe incluye una cláusula de rendimiento.
La cesión de Okay Yokuslu al Getafe fue la última operación que realizó el Celta en el mercado de invierno y los detalles de esta negociación los ha revelado el agente del mediocentro a AS. Batur Altiparmak muestra cierto malestar con la actitud de los dirigentes celestes, también lamenta la gestión de la plantilla que realiza Eduardo Coudet y confirma que el Valencia pujó por el centrocampista. Además, el representante turco apunta que la opción de compra pactada con el presidente azulón Ángel Torres incluye una cláusula de rendimiento.
“No fue fácil sacar a Okay del Celta”, señala Altiparmak, que vivió un intenso mes de enero en Vigo: “Estuve allí durante 14 o 15 días. No es un club fácil para negociar. El Valencia también quería fichar a Okay, pero al final el Celta tomó la decisión. Preferimos al Getafe”.
Seguir en LaLiga era el plan B. El pivote deseaba repetir experiencia en Inglaterra, donde la pasada campaña jugó cedido en el West Bromwich Albion. “Estábamos pensando en la Premier League, pero ningún equipo buscaba un jugador con el perfil de Okay. Por eso no llegó ninguna opción del Reino Unido. En España había otros clubs además del Valencia y del Getafe, pero no pensamos en ellos”, desvela Altiparmak.
Coudet
De la escasa aportación del centrocampista durante la primera mitad de esta campaña, 133 minutos en LaLiga y 153’ en la Copa del Rey, su representante responsabiliza a Coudet: “Okay estaba completamente en forma para afrontar esta temporada. Le dije a los dirigentes del Celta que había tenido un buen rendimiento en los últimos cuatro o cinco encuentros que había jugado, pero no había tenido muchas opciones. El entrenador prefirió jugar con doce o trece jugadores siempre y es por ello no nos quedó más remedio que irnos”.
El Getafe aceptó un préstamo con opción de compra. Al anunciarse la cesión solo trascendió la cantidad acordada (3 millones de euros) y que una de las condiciones es la permanencia del equipo azulón en Primera. Sin embargo, también se pactó una cláusula de rendimiento. Para que el club madrileño esté obligado a quedarse en propiedad con el internacional otomano, cuya vinculación con el Celta finaliza el 30 de junio de 2023, deberá jugar el 50% de los partidos. Por el momento, van dos jornadas y ha participado en una.