FutPro toma el mando: "Hay clubes que presionan a sus jugadoras para que no hablen"
El sindicato, con seis miembros, será el mayor representado en la mesa de negociación del convenio. "FutPro es ajeno a las luchas de poder", asegura su presidenta.
Estaban cansadas de esperar y decidieron pasar a la acción fundando un sindicato por y exclusivamente para el fútbol femenino. Una iniciativa impulsada por dos jugadoras del Barça y de la Selección, Andrea Pereira y Patri Guijarro, que se ha extendido a un gran número de vestuarios de manera espectacular, con apoyo muy mayoritario en clubes como Barça, Real Sociedad o Athletic. "Había un gran cansancio en los vestuarios. Dimos un paso adelante las jugadoras de los clubes más grandes porque somos las que menos miedo o presión tenemos de nuestros clubes", asegura Pereira en una entrevista a AS.
Tal ha sido el impacto de su cansancio que este sindicato, en el que todas sus miembros son jugadoras menos la presidenta y abogada, Amanda Gutiérrez, fue lanzado en noviembre y en enero ganó las elecciones sindicales, superando a AFE. "Yo no creía que íbamos a ganar. Nos pusieron muchos obstáculos en las elecciones y no pudimos estar en la constitución de ninguna mesa", cuenta la presidenta de este sindicato a AS.
"Hay jugadoras que están en sindicatos por las botas, becas, etc."
La abogada relata que cuando le contaron varias jugadoras la idea de fundar un sindicato se negó. "La gente me decía que las jugadoras me iban a dejar tirada a la hora de la verdad y no es así. Con el paso de los meses, el asunto fue más serio y las jugadoras siempre me apoyaron. Hay muchas, muchas jugadoras a las que les da igual las botas, las becas y se están viniendo a FutPro porque quieren cambiar las cosas", puntualiza Amanda.
Sobre las elecciones, Pereira dice que las futbolistas estaban muy tranquilas y sabían que iban a ganar. "Nosotras confiábamos en que íbamos a ganar porque había un gran número de jugadoras que ya llevábamos un tiempo descontentas con AFE. Creo que hay muchas jugadoras que están en algunos sindicatos por las botas, las becas, etc. Apostamos por este sindicato con el objetivo de conseguir algo que mejore el presente y futuro profesional de todas. Prefiero tener un convenio digno y pagarme yo las botas", subraya Pereira, que critica los pocos avances que se han llevado a cabo por parte de las instituciones estos años.
"Se puso la excusa del COVID, que es cierto que lo paró todo. Pero luego una vez que pasó el confinamiento y el año de la gran crisis del COVID tampoco se ha logrado crecer en derechos y demás. Las jugadoras sí que hemos avanzado y la prueba es el Balón de Oro o el The Best de Alexia, pero las instituciones se han dedicado más a las guerras que a que crezca la categoría en estos años", especifica Andrea Pereira.
FutPro, un sindicato "sin guerras de poder o influencias"
La defensa del Barça reflexiona sobre el hecho de que hayan sido dos jugadoras azulgranas las que hayan liderado este proyecto. "Al final queremos tener una Liga competitiva y para eso tenemos que crecer todas. Las jugadoras del Barça o de la Selección tenemos también más fácil el hecho de que se nos oiga porque no tenemos esa presión del club como hay en algunos casos y tenemos una buena imagen de éxito que nos puede servir de trampolín para todo este tipo de cosas. Nosotras tenemos más fácil ser críticas con el fútbol femenino porque nuestra situación en el Barça es muy buena y el club no nos presiona porque está tranquilo con lo que hace. Hay otros clubes que presionan a sus jugadoras para que no hablen".
Por su parte, Amanda asegura que la clave de FutPro es que nace con el único objetivo de "pelear por mejorar las condiciones de las jugadoras sin guerras de poder o influencias". "Están muy cansadas de las guerras heredadas del masculino", añade tras saber que serán el sindicato mayoritario (6 miembros) en las negociaciones por el convenio. Un documento en el que quieren abordar puntos como el salario, la parcialidad, la maternidad y la Lista de Compensación. Las jugadoras quieren seguir avanzando y harán lo que haga falta. Y es que ya no sólo derriban barreras en el campo. También lo hacen fuera de él. Este sindicato es prueba de ello.