Esteban Orozco, el autor del gol que tumbó a Argelia: "Solté alguna lágrima"
Juga con Guinea Ecuatorial, pero nació en Zaragoza y se crió en Utrera: "El gol lo metí yo, pero todos mis compañeros lo sintieron como suyo".
Esteban Orozco (Zaragoza, 1998) fue, al menos durante unas horas, la persona más popular de África. Suyo fue el gol con el que Guinea Ecuatorial, una de las selecciones más modestas del continente africano, se impuso 0-1 a Argelia, que encadenaba 35 encuentros y casi tres años sin hincar la rodilla. Mahrez, Feghouli, Mandi, Bounedjah o Brahimi. Todos quedaron eclipsados por Orozco y la 'familia' de Guinea Ecuatorial, un combinado compuesto en su amplia mayoría por futbolistas que juegan en la pirámide del fútbol español. "En el fútbol, cuando saltas al campo las figuras y los nombres desaparecen. Ahí dentro solo somos 11 contra 11. Y gana el mejor, quien más se lo merece. Les tuvimos respeto, pero no miedo. Hicimos un buen partido, competimos hasta el final y nos llevamos la victoria", reflexiona en AS un Esteban Orozco que pasó por la cantera del Real Betis y actualmente milita en el Antequera, de Segunda RFEF, con cuya camiseta no ha debutado esta temporada -ni siquiera tiene ficha-.
Tras caer en la primera jornada frente a Costa de Marfil, Guinea Ecuatorial afrontó el partido ante la vigente campeona de la Copa África, Argelia, con la necesidad de obtener un resultado positivo. "Merecimos más ante Costa de Marfil y pensamos que si jugábamos de la misma manera y con la misma actitud podríamos hacerle mucho daño a Argelia. Salimos a ganar, nosotros nunca especulamos con el resultado", descubre Orozco, que en el minuto 70 'cazó' un balón dentro del área que convirtió en el primer y único tanto del encuentro: "Cuando vi el balón venir hacia mí no pensé nada, solo en meterla. Después se me pasaron muchas cosas por la cabeza. Sentí muchas emociones. Pensé en todo lo que había trabajado para llegar hasta allí, en mi familia, el grupo... Nos merecíamos esa victoria. El gol lo metí yo, pero el 100% de Guinea Ecuatorial y todos mis compañeros lo sintieron como suyo".
Cuando Esteban Orozco vio que el balón estaba dentro de la portería corrió hacia la grada visiblemente emocionado. "Solté alguna lágrima. De la emoción. Fue un gol muy importante ante una selección enorme como Argelia. Es algo que no pasa todos los días. Encima en agosto me lesioné y los doctores me dijeron que llegaría justo para la Copa África. Trabajé mucho para recuperarme y ver mi nombre en la convocatoria fue una gran alegría", desvela el central ecuatoguineano, que tras abrazarse con todos sus compañeros gritó 'te quiero' a la cámara: "Voy a ser padre. Mi niña va a nacer ya y no sé si voy a volver a tiempo para estar con mi novia en el parto. Se lo dediqué a ellas". Orozco recibió un aluvión de felicitaciones. Tantas que ni siquiera sabe si ha respondido a todas: "Lo he intentado, pero si hay alguien a quien no le he respondido le doy las gracias y aprovecho para pedirle disculpas".
Guinea Ecuatorial vivió una noche mágica, pero lo cierto es que aún tendrá que superar a Sierra Leona para asegurarse un puesto en los octavos de final de la Copa África. "Lo celebramos como tocaba, pero al día siguiente ya estábamos pensando en el partido contra Sierra Leona. Hemos hecho algo histórico, pero si no lo culminamos no habrá servido de nada", avisa Orozco, que rechaza cualquier comparación con el 'Nzalang Nacional' que alcanzó las semifinales de la Copa África en 2015: "Es cierto que aquí hay jugadores que ya estuvieron en ese campeonato, pero aquella era una selección y esta es otra. Va a sonar a tópico, pero nosotros vamos partido a partido. Cualquier aficionado que viera el partido contra Costa de Marfil igual pensó que estábamos aquí de paseo. Y si vio el partido ante Argelia puede creer que vamos a ganar el torneo. Pero eso no es así. Vamos pasito a pasito. A conseguir un buen resultado ante Sierra Leona y a ir superando obstáculos poco a poco". Esteban Orozco es prudente, pero se atreve a soñar con "seguir dándole alegrías al país".
Su madre murió tras el parto
Esteban Orozco se siente "español y ecuatoguineano a partes iguales". Cuando su madre estaba en un avanzado estado de gestación, el embarazo de complicó y parte de su familia decidió que viajara desde Guinea Ecuatorial hasta Zaragoza, donde dio a luz: "A los pocos días de tenerme falleció. Estuve dos años con mi familia biológica en Zaragoza y después me adoptaron mis padres de Utrera, que es donde he pasado toda la vida". Orozco dice que su vida está "dividida entre dos países", aunque solo uno de ellos, Guinea Ecuatorial, le ha permitido vivir el sueño de ser internacional. "Lo que siento cuando me pongo la camiseta del 'Nzalang Nacional' es indescriptible. Totalmente distinto a cualquier otra cosa que pueda sentir jugando al fútbol. Es algo que quien no lo vive no lo puede llegar a entender", explica el ídolo actual de toda Guinea Ecuatorial. 1,4 millones de personas vibraron gracias a su gol, pero "el mérito es de todos". "Es importante que todo el mundo conozca a esta selección", sentencia.