Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

ATHLETIC

La madre de los Williams: "Me puse a llorar con el gol de Nico"

María Arthuer se encuentra desplazada en Riad y vibró con la victoria del Athletic con gol de su hijo pequeño ante el Atlético. "No he podido dormir mucho”, confiesa.

Riad
La madre de los Williams: "Me puse a llorar con el gol de Nico"
JAVIER GANDULDIARIO AS

Los Williams vive un momento de felicidad máxima. Nico, el pequeño de la familia, consiguió el gol que tumbaba al Atlético y clasificaba al Athletic para la final de la Supercopa de España que se disputará el domingo contra el Real Madrid. Su tercer tanto con el primer equipo y también el tercero en este año 2022, tras el doblete copero contra el Mancha Real para estrenarse como regalo de Reyes (el 6 de enero).

Con Iñaki como mentor en la plantilla y en la vida, la familia está viviendo una recompensa tras todas las dificultades que tuvieron que pasar hasta asentarse en España. “Estoy muy emocionada y contenta. No es fácil que el niño de 19 años entre y marque un gol. Empecé a llorar cuando marcó el gol, estoy muy contenta y no he podido dormir mucho”, explicaba María, su madre, durante la mañana de hoy en el hotel de concentración del Athletic en Riad. Se desplazó junto a su hermana y el resto de los familiares de la plantilla rojiblanca a la capital de Arabia Saudí para seguir la evolución de sus hijos en el torneo, dejando una preciosa imagen cuando ni las vallas del estadio pudieron frenar la piña con sus dos hijos. "Salí corriendo en el campo para estar con ellos, tenía una alegría inmensa. Como estaba la valla, no pude abrazarlos como me habría gustado. Les digo que no arrojen nunca la toalla, que no miren al pasado, que lo hagan al frente".

Félix Williams y María Arthuer, los padres de Iñaki y Nico, se conocieron en un campo de refugiados cerca de Accra (capital de Ghana) y huyeron a Europa después de haber salido exiliados de Liberia. Iñaki ha contado en múltiples cómo sus progenitores, con María embarazada, tuvieron que cruzar descalzos el desierto para llegar a España. Llegaron a Melilla, treparon la valla y, tras ser retenidos por la Guardia Civil, las vueltas de la vida les llevó hasta Barakaldo, donde nació Iñaki.

Las penurias laborales trasladaron a los Williams a la zona media de Navarra, donde malvivieron de la recolecta y cuidado de animales, motivo por el cual Nico nació en Pamplona. Ahí fue donde Iñaki comenzó a llamar la atención de los ojeadores y ganarse un nombre en el Club Natación, convenido de Osasuna, que jugaba junto a Tajonar. Como contaba AS en 2015, en el Club Natación fue cuando Javier Aristu le echó el ojo. Un movimiento rápido con un ojeador rojiblanco, Félix Burgui, situó a Iñaki en el Pamplona.

Para cadetes, entrenaba de vez en cuando en Lezama. El agente Félix Tainta logró que, bajo un contrato, siguiera cedido en el Pamplona. Goleó hasta subir a los dos equipos juveniles. De vuelta al Athletic, pasó una prueba y Fue subcampeón de Copa juvenil (35 goles). Jugaría en el Basconia, en Tercera, y pese a ser operado de menisco, a mitad de año ascendió al Bilbao Athletic. Y en 2015, las bajas en la delantera le llevaron a asentarse en el primer equipo del Athletic. Motivo por el que Félix pudo volver de Londres, donde trabajaba, mientras María se quedaba con sus hijos haciendo labores de limpieza. Nico por su parte a los 10 años dejó Osasuna por el Athletic hasta convertirse en una de las revelaciones de la cantera y poner su nombre junto al de su hermano en la delantera del Athletic.

Mientras Iñaki afronta su octava temporada como un fijo en la delantera leona, un jugador que ha superado los 200 partidos consecutivos en Liga y que no se pierde uno desde abril de 2016, Nico está llamando a la puerta para ser clave en el futuro. El joven extremo de 19 años confesaba hoy en Riad que “todo va muy rápido. Hace poco estaba en Segunda B y doy las gracias al míster por la oportunidad y a los compañeros por lo bien que me han acogido. Para mí, mi hermano está por encima de todos los demás, está por encima de todos los top. Para igualar a mi hermano me queda mucho y más. La verdad es que me quedan muchas cosas por hacer. Soy muy joven, tengo que trabajar mucho para llegar a ser mucho mejor. Tengo los pies en el suelo, mi madre me ayuda a ello, mi hermano también es importante, me dice cosas para que no me suba demasiado”. Este domingo, los Williams quieren escribir otra página en la historia del Athletic. Su madre concluye: "Vamos a coger la Supercopa y llevarla a Bilbao, a celebrar este nuevo éxito".