Una espesa niebla obliga a desviar el vuelo del Espanyol
La expedición perica debía aterrizar en Valladolid pero ha tenido que tomar tierra en Madrid, por lo que se alarga su viaje a Palencia para jugar la Copa del Rey.
Además de los kilómetros recorridos durante el partido del pasado sábado ante el Levante, de auténtica locura (4-3 en el RCDE Stadium), a la plantilla del Espanyol que este martes se presentará sobre La Nueva Balastera, para medirse con el Palencia Cristo Atlético en la segunda ronda de la Copa del Rey, se le deberá añadir el cansancio por un contratiempo que ha sumado tiempo y distancia a su viaje.
La espesa niebla que se cernía sobre Valladolid, este lunes por la noche, ha impedido que el avión que transportaba a la expedición perica pudiera aterrizar en el aeropuerto de la capital pucelana, por lo que el vuelo ha sido desviado hasta Madrid. Y ha sido en Barajas donde finalmente, y sin mayores eventualidades, ha podido tomar tierra el equipo dirigido por Vicente Moreno.
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El imprevisto, más allá de haber aumentado los minutos de trayecto sobre el cielo, también ha provocado que haya pernoctado en Madrid y sea desde allí desde donde la plantilla del Espanyol viaje hasta Palencia, y no desde Valladolid como estaba estipulado, por lo que el viaje puede durar alrededor de dos horas más de lo que se suponía sobre el papel, así que la hora de llegada al hotel de concentración será tardía.
Los jugadores del Espanyol se ejercitaban este lunes a las 16:30 horas en el RCDE Stadium, para acto seguido conocer la convocatoria –en la que Raúl de Tomás, Diego López, Adrià Pedrosa y Keidi Bare son las ausencias más destacadas– y acto seguido subir al autocar y embarcar en el aeropuerto de El Prat en un chárter rumbo a Valladolid…
