Vuelve Borja Domínguez: ¿En dónde?¿Por quién?
El vigués fue titular en las siete jornadas previas a su sanción, cinco de pivote y en las dos últimas jugando como mediapunta en lugar de Pablo Torre
El sábado pasado, frente al Unionistas, Guillermo Fernández Romo puso en el once a Fausto Tienza y Sergio Marcos como pivotes, a Íñigo como extremo izquierdo y a Pablo Torre, como es habitual en la mediapunta. El madrileño ha afirmado varias veces, entre la incredulidad general, que quedó satisfecho, pese al empate y las pocas ocasiones generadas, del experimento. Eso podría significar que puede animarse a repetir en Valladolid la estructura de equipo que alineó ante los salmantinos. Sin embargo, hay un factor que puede cambiarlo todo: el factor Borja Domínguez.
El centrocampista vigués, al que Romo conoce desde que a los 16 años le promocionó al Juvenil A del Celta, al que entrenaba, se perdió el último partido por acumulación de tarjetas, pero llegó al partido de Zamora, en el que vio su quinta amarilla, con una serie de siete partidos consecutivos como titular. Cinco formando parte del doble pivote (cuatro con Íñigo y una, en Badajoz, con Tienza) y como mediapunta, en lugar de Pablo Torre, en los dos últimos partidos, contra el Bilbao Athletic y el Zamora.
"Bendito problema", suelen decir los entrenadores cuando se encuentran ante el panorama de tener a su disposición más jugadores de los necesarios para formar un once. Pero, en cualquier caso, el madrileño va a tener que optar entre dejar fuera a Borja o sacar del once a uno de los pivotes que jugaron la semana pasada, Tienza, Marcos e Íñigo, o dos de ellos si, como parece lógico, vuelve a entrar en la alineación un extremo izquierdo nato. Bustos o Camus. Queda otra opción, cargarse a Pablo Torre y que Domínguez sea mediapunta, pero esta, sin disculpa por viaje o cansancio del de Soto de la Marina, parece más extravagante.
Con Pablo Bobadilla todavía de baja por lesión, parece prácticamente seguro que el Racing repetirá la defensa de las dos últimas semanas, Unai Medina, Pol Moreno, Satrústegui y Simón. Isma López, que en las siete últimas jornadas solo ha jugado 12', arrastra molestias físicas, no ha entrenado con sus compañeros ni jueves ni viernes y es duda para entrar siquiera en la convocatoria para Valladolid.
En el entrenamiento de esta mañana, tras rondos, partidillo en campo reducido y estrategia, Guillermo Fernández Romo ordenó terminar con una serie de remates para los jugadores de ataque, menos Manu Justo y Bustos que desfilaron hacia el vestuario con los defensas y centrocampistas. En las últimas semanas el técnico madrileño ha implementado estas series finales en busca del gol con más frecuencia que en sus tres primeros meses en Santander. Parece que ahí, ante el gol, es donde Romo ve más margen de mejora en estos momentos.