Lo que le faltaba al Atleti: en Cádiz se reencuentra con Gil Manzano
El equipo rojiblanco se reencuentra en el Nuevo Mirandilla con el árbitro extremeño, con quien ha tenido varios episodios tensos en el pasado: João Félix, Diego Costa, Gabi...
El Atlético está herido, con el ánimo por los suelos y, por si fuera poco, en tres días le estará esperando una figura que pone muy tenso al equipo. Los rojiblancos visitan este domingo (18:30) al Cádiz y allí estará Gil Manzano impartiendo justicia. El árbitro menos deseado en el momento menos oportuno para un Atleti en el alambre.
La lista de disgustos para los rojiblancos cuando pita el extremeño es larga. El último episodio llegó en septiembre, Atlético-Athletic. No sólo fue la expulsión de João Félix —en una acción que empezó con un agarrón sobre él—, sino una serie de amarillas que tuvieron desquiciados a los jugadores. Y en la última jugada del partido, cortó una contra peligrosísima con Carrasco lanzado hacia Simón. Tras el encuentro, el propio belga y Savic lamentaron que es un árbitro con quien no se puede dialogar e incluso Andrea Berta, según recogió el acta, protestó indignado: "Este árbitro no vuelve aquí. Nunca más. Es muy malo". Incluso las Peñas emitieron un comunicado reclamando que Gil Manzano no pite más al Atleti. Dos meses después, se vuelven a ver todos los caras.
En verdad, la tensión con el colegiado internacional viene de lejos. Y desde el vestuario siempre insisten en que es más una cuestión de la actitud que tiene con ellos que de alguna acción puntual grave, como pudiera ser un penalti no pitado. Esa sensación de que "no puede haber diálogo" con él. Aun así, la temporada pasada, el Atlético ya se sintió perjudicado en el Sánchez-Pizjuán por una mano de Ocampos en la jugada que acabó en el 1-0, resultado final. En aquella noche, el equipo rojiblanco se cargó de amarillas...
Quizá el incendio más recordado es el del Camp Nou, con Diego Costa como protagonista, en la 2018-19. El delantero le espetó un "me cago en tu p... madre" al árbitro y fue correctamente expulsado. Gil Manzano agregó en el acta que Costa le había sujetado de los brazos y el castigo final se disparó hasta los ocho partidos de suspensión. También contra el Barça, pero en Copa del Rey, el equipo se quedó con diez por la expulsión en el túnel de vestuarios de Gabi, que reclamaba una mano anterior de Jordi Alba, que salvó un gol y en la contra lo marcó el equipo azulgrana.