Joselu, de deseo a amenaza
El ariete gallego, que estuvo en verano y sigue en la agenda del Sevilla, lidera la magnífica reacción del Alavés. Mientras, Julen Lopetegui quiere seguir alimentando el sueño de LaLiga.
Comienza el Sevilla una particular maratón hasta fin de año, de 9 a 11 partidos jugará entre Liga, Champions y Copa hasta el 31 de diciembre. 40 días que determinarán las verdaderas aspiraciones del club de Nervión, con un final de primera vuelta especialmente empinado en el que se enfrenta, entre otros, a Real Madrid, Villarreal, Atlético, Athletic y Barcelona. Ganar esta sobremesa al Alavés, por tanto, se convierte en casi obligatorio para seguir alimentando esa utopía que se sembró la temporada pasada y a cuya locura han ido adhiriéndose cada vez más optimistas empedernidos, con el equipo a tiro de piedra de lo más alto desde el principio: el título de Liga (sigue el partido de hoy en directo en As.com).
Una Liga de la que el Alavés sería colíder si se tomaran en cuenta solamente las últimas cuatro jornadas, en las que ha logrado salir pitando del infierno gracias a tres victorias y a un empate, éste por cierto en el Camp Nou. Joselu propicia la resurrección de Calleja, que hace poco más de un mes parecía desahuciado en el banquillo babazorro. El delantero gallego ha metido cinco de los ocho goles que lleva el Alavés, cuya raquítica producción anotadora sólo la empeora el colista Getafe. Joselu fue deseo del Sevilla en verano y se convierte hoy en amenaza para dar la razón a los que intentaron llevárselo al Ramón Sánchez-Pizjuán.
Fue Rafa Mir el que acabó por reforzar entonces el ataque sevillista. Cuatro goles ligueros no parecen una cifra reprobable para el murciano, al que el Sevilla se encomienda después de la lesión de En-Nesyri. Más le pesa a Mir su escaso tino ante la meta contraria, con dos fallos groseros en el derbi sevillano aún en la memoria. Lopetegui recupera a un artista, Suso, y pierde a otro, Papu Gómez. Sigue de baja Jesús Navas y la convocatoria apunta a alguna otra sorpresa desagradable para los de Nervión. En Vitoria faltará para varios meses Ximo Navarro pero Calleja dispone de todos los demás, con lo que no se espera revolución en un once que últimamente funciona bastante bien.