El Valencia de la locura
El conjunto de Bordalás ha empatado en los minutos finales ante Granada, Athletic, Mallorca y Atlético de Madrid. Gracias a esos puntos sigue mirando hacia arriba.
La locura se apoderó de Mestalla ayer cuando el Valencia logró contra todo pronóstico empatar el encuentro ante el Atlético de Madrid. Ese partido los che lo tenían prácticamente perdido, pero la fe del equipo y la puntería de Hugo Duro dieron a los de Bordalás un punto que les permite seguir mirando a la parte alta de la clasificación y que ya no supone una sorpresa para los equipos de LaLiga.
Y es que la de ayer no fue la primera ocasión en la que los del Turia 'rascaron' algún punto en los momentos finales de un encuentro. En la segunda jornada en Granada, los de Robert Moreno vieron como se les escapaba la victoria en el 88 en un penalti cometido sobre Gayà que posteriormente transformó Carlos Soler para el definitivo 1-1.
Lo mismo sucedió ante el Athletic, pero aquí la dificultad era mayor: Un gol por debajo y con un jugador menos los de Bordalás se veían con el partido perdido cuando el minuto 90 ya se había cumplido. Sin embargo, un milagroso gol de Marcos André permitió que los leones no se fueran del estadio che con la victoria.
Y como parece que a Bordalás y los suyos les gustan los retos, ante el Mallorca la cosa ya fue más increíble: En el minuto 92 el Valencia perdía 0-2, pero en el 93 y el 98 Guedes y Gayà pusieron las tablas para volver loco al feudo valencianista, en una situación muy similar a la vivida ayer ante los del Cholo Simeone.
Esos cuatro puntos 'extra', esos cuatro puntos de completa fe que han sumado los de Bordalás les permite marcharse al parón con otra cara. Los che ocupan el décimo puesto de la clasificación, tienen 17 puntos y están solo a dos puntitos de Europa, asumiendo que la séptima plaza de acceso a Europa, algo que ha ocurrido desde 2006 pero que solo se da si el campeón de Copa ocupa puestos Europeos. Sin embargo de no haber logrado esos cuatro empates mencionados estarían decimocuartos y solo tres puntos por encima del descenso. La fe mueve montañas.
De la locura... A la autocrítica
Si bien es reseñable que el Valencia y su locura hayan permitido sumar puntos al equipo, con el paso de las jornadas el discurso en el vestuario ha cambiado. De la euforia en Granada se pasó a la felicidad ante el Athletic, frente al Mallorca también había alegría si bien Gabriel Paulista mostró su enfado en público por empatar en Mestalla.
Bien, pues ayer esas dudas ya fueron más allá y Bordalás no dudó en hacer autocrítica públicamente en sala de prensa que "ahora podemos estar eufóricos por el empate, pero no podemos encajar tanto y solo parecernos a lo que yo quiero que seamos cuando recibimos un golpe y no desde el pitido inicial".