NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

CELTA - BARCELONA

La otra final del interino

Sergi se despide en un Celta-Barça clave para ambos equipos. El equipo azulgrana continúa sin poder ganar fuera y sólo ha marcado un gol. Dembélé se ha vuelto a caer y no hay extremos.

Araújo celebra la victoria en un ejercicio de petos en el entrenamiento con Sergi de fondo.
RODOLFO MOLINA / DIARIO AS
Ampliar

La obra de teatro terminó ayer en Doha; y hoy toca fútbol en Vigo (sigue el partido en directo en As.com). Se acaba la interinidad de Sergi, del que siempre se podrá decir que ha tenido un discurso. Laporta le dijo que tenía diez o quince días y, en ese tiempo, ha vendido orden, respeto al estilo, sentido de pertenencia al club y estado de ánimo. "En el entrenamiento he visto sonrisas", dijo ayer en su penúltima rueda de prensa, con un gesto cargado de melancolía. Ser entrenador del Barça para un canterano debe ser lo máximo, si no que se le pregunten a Xavi, y Sergi se ha sentido un privilegiado estos días hasta el punto de empoderarse y pensar que, por qué no, él podría haber seguido al frente de la nave.

Pero tal vez Sergi se esté jugando otras cosas, como la posibilidad de ser un interino oficial si algo no va bien otras veces. Y, para asegurárselo, debe ganar en Vigo como hizo en Kiev. Es su segunda final de la semana y, como en el Olimpiyskiy, el Barça está más necesitado de lo que cree. Todavía no ha ganado en cuatro salidas, sólo ha marcado un gol, el de Memphis en San Mamés, y tiene la zona Champions a seis puntos...

Para el Celta, la temporada ya empezó enrarecida con el lío entre Mouriño y Denis por el caso Bugarín. La Chachoneta de Coudet arranca y se cala, y su gasolina súper, que es Iago Aspas, no atraviesa su mejor momento. Iago, sin embargo, ha jugado grandes partidos históricamente contra el Barça. Los celestes ganaron en el Camp Nou la temporada pasada y conocen la fórmula para hacer daño con robos y transiciones que pueden construir bien porque técnicamente son un equipo bien dotado.

El Barça volverá a jugar en cuadro. Dembélé se ha vuelto a caer y no hay extremos. La moda en el Barça, y eso que no está Pedri, son los centrocampistas. Y la presencia de La Masia es masiva: Mingueza, Eric, Alba, Busquets, Nico, Gavi y Ansu. Mientras Xavi se lleva las portadas, Sergi quiere acabar su trabajo anónimo en silencio pero con triunfo.