Sergio, otra expulsión in extremis y baja para una defensa que tirita
Pocos días después de la roja a Rubén Pardo, el central se fue a la calle por otra acción discutida. Nueva ausencia para un Leganés que ya viajó a Almería en cuadro. Solo quedan cinco defensas.
El Leganés volvió a sufrir en Almería el castigo de una expulsión dudosa a pocos minutos de que terminara un partido. Si ante el Tenerife hace una semana le tocó a Rubén Pardo por tocar con el balón en la cara a Alex Muñoz (le cayeron luego dos partidos más por unos insultos que el vídeo demuestra que no existió), esta vez ha sido Sergio González el que ha sufrido una roja también cuestionada cuando, ayer, frenó una contra del Almería en el 91’.
El defensa madrileño se lanzó a parar a Appiah con tan mala suerte que llegó a pisarle el tobillo. Aunque inicialmente parecía una acción de tarjeta amarilla, el árbitro del partido, Galech Apezteguía, interpretó que era algo más que una entrada brusca y señaló juego violento. Lo suficiente para mostrar la roja al zaguero, que se perderá, salvo que fructifique el recurso que presentará el Leganés, un partido. No estará ante el Cartagena el martes en Butarque a las 21:15.
Sólo cinco defensas
La baja supone un golpe duro de nuevo para un Leganés que está especialmente castigado por las ausencias de sus jugadores. De hecho, a Almería se ha viajado con diez bajas de facto, aunque en verdad uno de los tocados, Unai Bustinza, ha viajado con el resto de la convocatoria, eso sí, sin muchas opciones de jugar por estar justo recién salido de su lesión de abdomen.
Si el capitán llega a tiempo para el duelo ante el Cartagena, el Leganés mantendrá para ese partido las citadas diez bajas siempre y cuando no se levante el veto sobre Borja Garcés, de los diez ausentes el único que se ha quedado fuera por decisión técnica (aunque más que técnica, es decisión disciplinaria). La zona más castigada será una zaga que tendrá sólo seis jugadores disponibles: Palencia, Bustinza, Tarín, Bruno y Javi Hernández.