La Real Sociedad levita y sueña a lo grande en la Liga
El equipo donostiarra celebra su primera Copa en Anoeta, es líder en solitario de Primera y disfruta con una afición entregada. El estadio, ya con aforo al cien por cien.
La Real Sociedad vive uno de los momentos más dulces de su historia reciente gracias a los éxitos que poco a poco va logrando el equipo entrenado por Imanol Alguacil. Después del subidón vivido la noche del sábado en Anoeta, quedó claro que en este momento el club donostiarra está literalmente levitando y que se ha ganado el derecho a soñar a lo grande. Porque la estadística es tozuda y dice que la Real es ahora mismo lo más parecido que se puede ver a lo que se conoce como un equipo de moda (con permiso también del Rayo Vallecano).
Y es que realmente le sale casi todo de cara. El ejemplo más claro se vio en la victoria contra el Mallorca, que llegó en el minuto 90 con un gol de un canterano recién llegado al primer equipo, Julen Lobete, después de jugar toda la segunda parte con un jugador menos. Y en la noche en la que celebraba su primera Copa en el nuevo Anoeta.
Fue de forma indudable una noche mágica. Inolvidable. La afición realista tardará tiempo en olvidarla. Parece que se alinearon todos los astros para que la esperaba celebración en Anoeta de la Copa del Rey ganada el 3 de abril en La Cartuja fuera a lo grande. Ayudó el inesperado desenlace del partido contra el Mallorca, es inevitable. Justo antes del descanso, la Real se quedaba con un jugador menos por la expulsión de Aihen Muñoz y se veía obligada a hacer un sobreesfuerzo durante toda la segunda parte para tratar de sacar un punto que según pasaban los minutos se empezaba a ver como un botín más que valioso. Y entonces apareció el jugador número 12 de esta gran Real, la grada del Reale Arena. En su primer partido con aforo al 100% después de la pandemia, apretó como nunca, al colegiado y a los rivales, y llevó en volandas a sus jugadores hacia una victoria con la que la fiesta entraba literalmente en éxtasis.
Con el gol de Lobete, la Real entraba en órbita y se venía literalmente arriba, porque el gol suponía que el equipo realista termina la jornada como líder en solitario de Primera división, gracias también a que el Real Madrid y el Atlético de Madrid tienen sus partidos aplazados. La Real suma 20 puntos en un comienzo de temporada realmente impecable, porque en Anoeta el equipo de Alguacil no ha recibido un solo gol y ha ganado todos los partidos y solo ha empezado contra el Sevilla. Los donostiarras perdieron el primer partido contra el Barcelona en el Camp Nou, pero desde entonces no saben lo que es perder, y suman ya diez encuentros seguidos sin conocer la derrota. Le sale todo, hasta ganar partidos como el del Mallorca, en el que no juega bien y acaba ganando con el gol de un jugador que pertenece al filial y que está en dinámica del primer equipo por las lesiones que sufre.
Y, claro, ahora todo el mundo sueña a lo grande en San Sebastián. Sueñan con jugar la próxima temporada de nuevo la Champions League. "Espero que no quede en una anécdota el hecho de vernos arriba con los más grandes. Iremos viendo dónde nos pone la Liga", explicó Zubimendi el sábado. Sueñan con volver a pelear por la Liga como en 2003, aunque eso suene a palabras mayores. Se han ganado el derecho a soñar. Pero lo primero será seguir en la Europa League, y para ello será fundamental ganar este jueves en Austria. Pero nada parece que puede parar a la Real, ni las lesiones que le han impedido tener por ahora a toda la plantilla disponible desde que empezó la temporada.