La sonrisa de Zoe y del Villarreal
La niña de dos años con la que el club se volcó para que pudiera ser operada en Boston de una cardiopatía muy grave. El pasado lunes cumplió dos años y decidió celebrarlo com su equipo.
La sonrisa de Zoe Prieto Blanchadell es la del Villarreal, y la de todos sus seguidores. El pasado lunes cumplió dos años y aprovechó para pasar a visitar a su familia amarilla, esa que fue parte importante para que a día de hoy Zoe pueda hacer una vida normal. Y es que la vida de Zoe fue complicada desde el inicio, ya que una cardiopatía compleja le hacía tener pocas esperanzas. Por ello, sus padres desesperados, empezaron a movilizar a la ciudad de Vila-real, ya que el objetivo y la esperanza eran una compleja y cara operación en Boston.
Una movilización que llegó a los oídos de Pau Torres, futbolista de Vila-real y del Villarreal, que llevó el caso al vestuario. Ese día, el club, con Emery a la cabeza, se pusieron en marcha. El objetivo eran los 170.000 euros que podían salvar la vida de Zoe, que además se debían recaudar a contrarreloj. Y cómo explica su madre, Laura, fue "la aparición del Villarreal la clave para ello", ya que en muy poco tiempo "se superaron los 200.000 euros". Todo gracias a las donaciones anónimas de aficionados, donaciones de los jugadores o, de los miembros del Consejo de Administración.
Todo tipo de iniciativas y actividades por parte del club para que Zoe acudiera a Boston y pudiera ser tratada de su cardiopatía compleja (tetralogía de Fallot y artesia pulmonar), algo que se llevaría a cabo hace unos diez meses de forma satisfactoria. Una operación compleja de más de diez horas, su madre recuerda que "fue una operación de más de diez horas, teníamos mucho miedo, pero aguantó como una campeona".
Esa intervención permite a Zoe tener "una vida normal, para que pueda hacer lo que las niñas de su edad sin fatigarse, y no tener que vivir al lado de la máquina de oxígeno", aseguraba su madre. Este fue el primer asalto de alguno más que queda por pelear, pero Zoe tiene a su lado a su equipo y a su gente, una gran corazón amarillo que pelea y la cuida.