La cuerda se tensa en el Levante
El conjunto de Orriols iguala su peor racha sin ganar en Primera, con quince partidos consecutivos, la misma que le costó el puesto a Muñiz.
El inicio de temporada se le está haciendo bola al Levante. Las sensaciones no son las mismas que al comienzo de campaña: los puntos que se escapaban en los tramos finales han dado paso a un choque de realidad con los últimos resultados. Los errores en tramos clave de los encuentros y la falta de eficacia arriba han sumido al equipo en una crisis deportiva que iguala la peor racha del club en Primera División, con quince partidos, entre el tramo final del pasado curso y este inicio, sin conocer la victoria.
El Levante llega a la séptima jornada de campeonato, todavía por cerrar por el Celta-Granada, y con varios equipos con una jornada al cuello, con el agua al cuello y siendo uno de los equipos más goleados de la categoría, con 12 tantos, igualado con el Getafe y Mallorca, próximo rival granota. Si el conjunto de Róber Moreno gana en Vigo, los levantinistas cerrarían la jornada en descenso.
Precisamente el curso pasado Paco López, sobre el que se ciernen las dudas, afrontó un inicio de curso también convulso. El equipo afrontó una racha de ocho encuentros sin vencer después tras las dos primeras jornadas de campeonato (derrota por 4-2 frente al Valencia y victoria por 1-3 ante Osasuna).
El Levante enderezó el rumbo en la jornada 12 frente al Getafe de Bordalás en el primer encuentro de diciembre y vivió una gran racha hasta marzo, que valió prácticamente la permanencia y el paso histórico por las semifinales de Copa. Sin embargo, a mediados de marzo, sin objetivos tangibles, el equipo se cayó de forma estrepitosa.
La tendencia derrotista ha continuado en este inicio de curso, pese a una buena pretemporada, y un arranque con atisbos de cambio de dinámica. Los resultados, no obstante, no acababan pese a las sensaciones positivas y la confianza del equipo comenzó a decaer. Frente al Rayo, al ponerse por delante, aparecieron las urgencias de un equipo que empieza a impacientarse por sumar de tres.
Las sensaciones y el ambiente se han ido enrareciendo con el paso de las jornadas y el equipo ha sido incapaz de alzar el vuelo en partidos de 'su Liga' ante Rayo, Elche o Celta. Frente al Barcelona, se le vieron más que nunca las costuras a un equipo que comienza a partirse, como se pudo ver en el Camp Nou y en el que aparecen las dudas cuando el viento no sopla de cara.