Aprobados y suspensos de un Espanyol que acaba agotado
El conjunto blanquiazul completó unos grandes 45 minutos con Embarba y Darder como directores, pero, mermado tras el descanso, cayó en el 99.
Diego López: El veterano guardameta salió en la fotografía del 1-2 en el minuto 98 de partido. Un remate de Lemar no logró despejarlo fuera de la portería y entró llorando a la red. Anteriormente, el meta de 39 años no había tenido excesivos problemas gracias al buen trabajo de su defensa. No realizó paradas destacadas y se mostró seguro en el juego aéreo y con los pies. Su defensa le protegió, menos en ese tramo final en el que no estuvo acertado.
Óscar Gil: Con la constante ayuda de Aleix Vidal, el ilicitano le tocó bailar con Carrasco, jugador igual de peligroso al espacio que con el balón al pie. Superado en algún momento puntual, logró frenar la mayoría de ataques, pero no en la acción del gol ni tampoco en la del 1-2. Ambos llegaron por su costado. En esta ocasión, apenas profundizó por la derecha, solamente en algunos compases de dominio blanquiazul en el primer tiempo.
Calero: Jugó con molestias y tuvo que ser sustituido en el descanso. En esos 45 minutos Calero controló los desmarques de Suárez, ayudó a Óscar Gil y no cometió errores defensivos de bulto. En su debut este curso, cuajó una notable primera mitad ayudado por la solidaridad defensiva de un Espanyol que defendió cerca de su área.
Cabrera: El central uruguayo repitió sus luces y alguna de las sombras habituales. Fue el mejor en el área, un gigante en el juego áereo y realizando un marcaje de mérito a su compatrioita Luis Suárez, mientras que con el balón no logró conectar con el centro del campo salvo un paseo meritorio que dejó solo (aunque en fuera de juego) a RdT. Con el 1-0, el urguayo se acrecentó y fue un líder en defensa.
Pedrosa: El lateral izquierdo se ha convertido en un jugador estable, regular. En la primera mitad lució su despliegue físico en dos acciones que generaron ocasiones. Una de Embarba, que estuvo lento en el remate, y otra cuyo centro no encontró rematador. En fase defensiva controló el costado derecho aunque la entrada de Lemar le generó más problemas.
Morlanes: Jugó de seis, esa posición en la que no se siente tan cómodo, pero en la que puede brillar por sus características. Con buen pie, filtró pases por dentro superando líneas que conectaron con Darder y Melendo, aunque se le vio aún algo tímido. Defensivamente aportó al nivel de sus compañeros. Le faltan minutos, pero se le augura un buen curso.
Darder: Su primera parte de un recital de acciones técnicas y de despliegue físico. Un Darder superlativo que en el minuto 15 protagonizó una acción individual que le llevó al córner a poner un centro y minutos después encadenó dos ruletas características que hicieron imposible que Koke y Llorente pudieran quitarle el balón y levantaron los aplausos. Trabajó, dio criterio y fue el general del mediocampo.
Aleix Vidal: Su misión en el partido era clara: ayudar a Óscar Gil ante Carrasco y Hermoso, los dos jugadores que tejen el juego del ataque. Y en catalán, que se estrenaba de titular, cumplió con el cometido. En ataque se encontró más lento en sus acciones, faltó de ritmo, y fue sustituido en el minuto 75.
Melendo: Después de tres jornadas sin participación, el canterano debutó a lo grande. En la parte derecha del 4-3-3 le dio sosiego y criterio a los ataques blanquiazules, sin demasiada participación pero con dos o tres pases peligrosos buscando a Pedrosa o RdT. El mediapunta fue una pieza más del excelente puzzle perico.
Embarba: No necesita el extremo participar demasiado en el juego. A Embarba le gustan más las jugadas que jugar, sus regates y tiros, su pillería,como la que estuvo a punto de dar el primer tanto al Espanyol con una anticipación y un tiro cruzado nada más empezar. En el minuto 39 se sacó otro zambombazo de la chistero que Oblak despejó a córner. Era el preludio del gol de córner, a centro suyo. En el segundo tiempo estuvo más impreciso, solidario eso sí en defensa.
Raúl de Tomás: Su gol es una obra de arte, un cabezazo en el primer palo girando el cuello al palo largo. Oblak solo pudo acompañarla como un mayordomo. El delantero lució en algunas acciones técnicas, trabajo defensivamente pero no tuvo más ocasiones al margen de una acción de uno contra uno ante Oblak que no resolvió aunque se le señaló fuera de juego.
Recasens: A sus 19 años le tocó debutar en Primera ante Griezmann y Luis Suárez por la lesión de Calero. El jugador se encontró un contexto de partido con un Espanyol replegado defendiendo el 1-0, lo que le ayudó a tener constantes ayudas. Salió en la acción del 1-1 anulado y luego en el verdadero, al robarle la cartera Carrasco en el área en una acción en la que el resto de la defensa pecó de pasividad.
Keidi Bare: El jugador le dio descanso a Morlanes en el centro del campo. Llevaba solo dos entrenamientos después de jugar con Albania. Realizó ayudas en banda aunque no reaccionó a tiempo a llegar a defender a Carrasco en el 1-1. Con balón cometió alguna pérdida pero le aportó fuerza y tuvo que multiplicarse para defender ante el cansancio de Darder.
Loren: Desconectado en ataque ante un Espanyol a merced del Atlético, logró sacar algunas faltas que le dieron aire al equipo perico, pero apenas pudo intervenir en el juego ni crear desequilibrios.
Nico: Salió el dorsal 21 y todo Cornellà-El Prat atronó. El canterano, ubicado en la izquierda, no tuvo la suerte de conectarse al juego con acciones peligrosas en un partido dominado al final por el Atlético.
Dimata: Creó e hizo faltas, batallador en cada duelo, diana de Diego López en los saques de portería. No pudo hacer más el belga.