De Paul hace diana
El argentino dio su primera asistencia como rojiblanco en su estreno en el once. Los balones largos al hueco, un nuevo gran arma para el Atlético.
Rodrigo de Paul es, hasta el momento, el gran fichaje del Atlético para esta temporada. El argentino se presentó para la afición colchonera que no le tenía del todo ubicado con una exhibición en la final de la Copa América, demostrando trabajo, recuperación, esfuerzo, salida de balón y una gran capacidad de romper líneas con sus pases en largo, forma en la que asistió a Di María para que hiciese el único gol del encuentro que sirvió para derrotar a Brasil en Maracaná.
Y en su primer partido en su nuevo estadio, el Wanda Metropolitano, volvió a dejar patente que tiene un guante en su pie derecho. Kondogbia recuperó el balón en el centro del campo y De Paul sólo necesitó levantar la cabeza un instante para detectar el desmarque de Correa al espacio. Puso un balón largo a su compatriota, Casilla no conectó con el esférico en su salida y el ‘10’ mostró mucha sangre fría para lograr su tercer gol en únicamente dos jornadas de Liga, unos tantos que ya valen seis puntos.
No se quedó ahí. Al inicio de la segunda mitad se repitió el proceso. Balón para De Paul en el círculo central del centro del campo, ojeada rápida al movimiento de Carrasco y esférico al hueco para dejarle de cara a puerta con metros por delante, en una acción donde el belga decidió girar sobre su eje y sacó un remate muy complicado que atajó bien el portero del Elche. Son las primeras muescas de un De Paul que sumará mucho en ese tipo de acciones para el Atlético, al igual que a balón parado. El argentino destaca por su juego en largo y en la visión y capacidad para entender los desmarques de sus compañeros, algo mortal ante cualquier defensa adelantada.
Simeone sabe que ha sumado un arma con la que no contaba con tal precisión desde hace tiempo. De Paul ha heredado el número ‘5’ que tantos años y tan bien portó Tiago, otro especialista a la hora de jugar en largo desde el centro del campo y el argentino quiere honrar el dorsal explotando todas sus habilidades. Ante el Elche completó siete de diez pases largos y generó tres ocasiones de gol, culminando Correa una de ellas. Siempre trabajador y atento en la presión, recuperó cinco balones.
Todavía está cogiendo los movimientos y galones en el centro del campo, por lo que tiene que ir ganando continuidad y encontrando una zona de influencia cuando Llorente ocupe ese perfil derecho del centro del campo donde más le gusta jugar. Pero, en los 61 minutos que estuvo sobre el campo, ya fue mostrando varias de sus grandes cualidades que pueden enamorar a su nueva afición. Un lanzador para la velocidad de los talentosos atacantes colchoneros, los grandes beneficiados por la llegada de un De Paul que quiere ser importante en el Atlético desde su primer día.