Aprobados y suspensos de Las Palmas: Ferigra salvó al equipo
Salvó un gol cantado en el descuento. Gran pareja la suya con Raúl Navas. Peñaranda, exceso de energía sin premio. Loiodice, falto de ritmo.
Raúl Fernández:
Tras las buenas sensaciones transmitidas ante el Valladolid, volvió a demostrar que está del todo recuperado para el fútbol de alto nivel. El poco trabajo que tuvo lo sacó delante de sobra.
Alvaro Lemos:
La tendencia tan defensiva y estratégica del partido no le ayudó. Tuvo alguna falta peligrosa que lanzó al limbo.
Curbelo:
Futbolistas de muchas garantías en la zaga amarilla. Tampoco es que hoy tuviera mucho jaleo, mas rindió igual como central que como lateral izquierdo cuando se marchó Cardona.
Navas:
El jefe de la defensa de Las Palmas. Su veteranía le llevó a ganar la siempre difícil puga con Stuani, uno de los mejores futbolistas de la categoría.
Ferigra:
Se llevó un tremendo golpe tras un choque con Bernardo al filo del descanso, pero nada le detuvo. En el minuto 91 salvó un gol más que cantado de Stuani. Fichaje revelación.
Cardona:
Mejor en defensa que en ataque, fue sustituido por Pejiño en la segunda parte. Gran trabajo como sustituto de Benito, que estaba expulsado.
Sergio Ruiz:
Como casi siempre, de los más destacados de Las Palmas. Tuvo algún gesto técnico superlativo, y se sumó al ataque cuando más falta hacía. El auténtico termómetro de su equipo.
Fabio:
Más que efectiva su labor como acompañante de Sergio Ruiz. Le dio aplomo al equipo. Siempre bien colocado para evitar las embestidas del Girona.
Loiodice:
Tras lesionarse en diciembre y no jugar hasta hace un par de semanas, se le sigue notando falto de ritmo. Su progresión va aumento, pero fue sustituido por Maikel Mesa.
Moleiro:
Continúa ofreciendo detalles de futbolista ‘diferente’, hoy en su estreno como titular en partido oficial. Óscar Clemente, que entró por él, no pareció mejorar su rendimiento.
Peñaranda:
Puro nervio, a veces mal entendido. No dejó de pelear, pero su falta de acierto convirtió en cantado su cambio por Jesé. En la primera parte casi culmina una chilena que pudo suponer uno de los goles de la temporada.
Maikel Mesa:
El capitán entró en la segunda parte para aportar músculo en el centro del campo. Batalló como el que más. Imprescindible para Pepe Mel.
Jesé:
Le faltó el acierto que sí tuvo contra el Valladolid, pero no la intensidad y el derroche físico pese a la evidencia de que le queda camino por recorrer. Alguna internada peligrosa pero sin éxito.
Óscar Clemente:
Salió para intentar desatascar el partido y darle oxígeno a los suyos, pero pasó desapercibido.
Pejiño:
El extremo gaditano siempre suma tenga los minutos que tenga. La dulzura de su pierna izquierda es agua bendita para Las Palmas. Generó varias llegadas muy peligrosas que no encontraron rematador con éxito.