El Girona no gana su primer partido de Liga desde la 2015-16
El conjunto rojiblanco estrena este curso el sábado ante el Amorebieta y quiere empezar con buen pie. Su último debut con triunfo, ante el Bilbao Athletic (0-1).
Se acabaron las pruebas. El Girona arranca este sábado la Liga recibiendo al Amorebieta en Montilivi (19:30) y busca un estreno feliz. Las sensaciones que desprende el bloque de Michel son muy positivas, pero ahora toca traducirlas en una temporada que se antoja tan ilusionante como clave para el futuro de la entidad. Tras dos finales de playoff de ascenso a Primera perdidas de manera consecutiva, el reto es que a la tercera sea la vencida.
Arrancar bien la campaña es crucial para ganar en tranquilidad y tomar conciencia que el camino emprendido durante la pretemporada ha sido el correcto. No le espera un debut de Liga sencillo al Girona porque recibe al Amorebieta, recién ascendido, pero la plantilla rojiblanca no piensa en otra que en sumar los tres puntos. Y más cuando a Montilivi podrán acudir 3.360 aficionados. Eso sí, en los últimos años le ha perseguido un gafe en el entreno que este año tratarán de sacudirse de encima. No ganan el primer partido de Liga desde la temporada 2015-16. Fue en San Mamés contra el Bilbao Athletic (0-1) y gracias a un tanto de Jairo Morillas en el minuto 80'.
Seis años dan para mucho y la demostración está en que de aquel estreno triunfal de Liga de San Mamés no queda ningún superviviente. Mucho ha cambiado el Girona desde entonces, pero lo más importante es que ahora se quiere volver a revivir esa sensación de ganar el primer liguero. Desde la temporada 2015-16, el balance ha sido fructífero porque se obtuvieron cuatro empates (ante Sporting, Valladolid, Atlético de Madrid y Sevilla Atlético) y una derrota. Precisamente esta se produjo la temporada pasada ante el Sporting. Fue un debut complicado porque se cayó 2-0 por culpa del doblete de Djuka y, además, Enric Franquesa fue expulsado.