Se cumplen los peores presagios: Carlos Fernández se rompe el cruzado

Los peores presagios se han cumplido con la lesión de Carlos Fernández. El delantero de la Real Sociedad sufre una rotura de ligamento cruzado anterior en su rodilla derecha, tendrá que pasar en breve por quirófano y deberá estar de baja entre cuatro y seis meses. El futbolista sevillano se lesionó en el amistoso que jugó el equipo realista en el AFAS Stadion de Alkmaar contra el AZ. A los 20 minutos de juego, cuando trataba de robar un balón a un rival, se lanzó al suelo sin que por medio hubiera alguna patada y empezó a hacer gestos ostensibles de dolor agarrándose su rodilla derecha. Saltaron todas las alarmas en la Real, porque la imagen tenía muy mala pinta; pero el hecho de que saliera por su propio pie del terreno de juego hizo albergar alguna esperanza de que no se tratara de la peor de las lesiones.

Pero el parte médico emitido por la Real Sociedad este mediodía ha sido demoledor. "Carlos Fernández sufrió una torsión de la rodilla derecha durante el partido amistoso de ayer frente al AZ Alkmaar. En la resonancia magnética realizada esta mañana se aprecia una rotura del ligamento cruzado anterior. Se trata de una lesión subsidiaria de tratamiento quirúrgico. En los próximos días se informará al respecto. Inicia tratamiento con fisioterapia y trabajo personalizado", ha explicado la Real Sociedad.

El diagnóstico definitivo de la lesión de Carlos Fernández ha dejado frío a todo el entorno del club donostiarra. Imanol pierde una pieza muy importante para gran parte de esta temporada. Porque el plazo de recuperación de este tipo de lesiones oscila entre cuatro y seis meses, lo que significa que hasta febrero no se podrá contar con el delantero sevillano. Aunque eso no se podrá conocer con más certeza y exactitud hasta que no sea operado, algo que se conocerá en los próximos días. La realidad es que Carlos Fernández enseguida fue consciente de la gravedad de la lesión cuando le la produjo en Holanda, porque ya tiene experiencia en este tipo rotura.

Hace cinco años, un 6 de diciembre de 2016 ya se rompió el ligamento cruzado de su rodilla izquierda. Entonces jugaba en el Deportivo de la Coruña en Segunda, y en aquella ocasión tardó seis meses en recuperarse y volver a ejercitarse en solitario, más otros tres más hasta que pudo entrar en la dinámica de grupo, ser convocado y poder jugar. Si repite ese proceso, Carlos Fernández no podrá jugar hasta abril, con solo un mes de competición por delante, por lo que se perdería prácticamente toda la temporada. Este contratiempo importante puede hacer que la dirección de fútbol de la Real se replantee la situación de Willian José, cuyo futuro estaba más fuera que dentro del club realista. Pero quizá pierda esa condición de transferible y se deje de negociar por su venta, y que el brasileño tenga que quedarse finalmente esta temporada en la Real. Aunque sería contra su voluntad, porque ya dejó clara su postura antes de iniciarse la pretemporada. Así que habría que ver dónde y cómo tiene la cabeza.