'Operación salida' parada y sin ofertas
El Real Valladolid sigue afanándose en bajar los excedentes de su plantilla, aunque lo lento del mercado juega en su contra.
La marcha de Diego Alende en dirección a Lugo, producida después de su renovación, ha bajado el número de jugadores del Real Valladolid a 35, cifra elevada maquillada en los entrenamientos por la crisis interna de coronavirus. Esto no quiere decir que no se esté trabajando; lo que ocurre es que la dirección deportiva que dirige Fran Sánchez se está encontrando con la lentitud del mercado para sacar esos excedentes en la plantilla de Pacheta.
A pesar de haber trascendido diferentes intereses en varios futbolistas, lo cierto es que a estas alturas el club no ha recibido más ofertas que la rechazada del Valencia por Marcos André, de tres millones de euros. Si bien la prensa valenciana insiste en este movimiento, según ha podido saber AS, no ha habido aún un segundo ofrecimiento. Del mismo modo, el interés suscitado por jugadores como Óscar Plano (Levante) o como Javi Sánchez (Fiorentina y Granada, entre otros), tampoco se ha convertido en el traslado de una propuesta oficial.
La diatriba actual se encuentra en que el Real Valladolid no quiere ceder a sus principales activos, con los que preferiría seguir contando o, en su defecto, dejarles salir solo mediando traspaso, y, al mismo tiempo, está encontrando dificultades en la fórmula y destino de otra serie de jugadores, a los que no tiene el ánimo de rescindir para no disminuir su capacidad económica, menor que en temporadas anteriores por el descenso.
Con todo, la situación no ha variado al respecto de las últimas semanas; el trabajo es arduo a fin de disminuir el plantel, que cuenta a día de hoy con diez jugadores más de los que pueden ser dados de alta en LaLiga, lo que hace que la prioridad siga estando en esas salidas sobre las llegadas a pesar de la lentitud con la que en general se está moviendo el mercado, apenas sin margen económico para acometer grandes operaciones.