NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

DEPORTIVO

La agenda de Borja Jiménez comienza a funcionar

Los dos últimos fichajes del Deportivo, Pablo Trigueros y William de Camargo, son jugadores a los que el técnico ya dirigió en diferentes etapas.

Actualizado a
21/10/20 PARTIDO SEGUNDA DIVISION
 ESPANYOL - MIRANDES
 Embarba (23) RCD Espanyol
 Pablo Trigueros (24) CD Mirandes
Gorka LeizaDiario AS

El Deportivo continúa incrementando el número de fichajes en su profunda remodelación de la plantilla. El inicio de semana ha sido muy activo en la Plaza de Pontevedra, en la que se han cerrado dos nuevas incorporaciones. El lunes se anunciaba la llegada de William de Camargo,extremo brasileño que reforzará la parcela ofensiva del club coruñés. El martes lo hacía Pablo Trigueros, un central diestro para apuntalar el eje de la zaga. Ambos futbolistas tienen una cosa en común: los dos estuvieron en diferentes etapas bajo las órdenes de Borja Jiménez.

El caso más reciente es el de William de Camargo, futbolista que jugará esta campaña en Riazor como cedido procedente del Leganés. El atacante brasileño estaba a préstamo en el Cartagena la temporada 2019-20, club al que llegó Borja Jiménez a falta de diez partidos. El técnico abulense reflotó al equipo y acabó logrando el ascenso a Segunda con De Camargo, que anotaría dos goles en esa recta final, como uno de sus jugadores de confianza. Al año siguiente, ya en la categoría de plata, repetirían en el Cartagena hasta la destitución del técnico.

El juego aéreo de Pablo Trigueros

El segundo pupilo de Borja Jiménez en aterrizar en el Deportivo procedente de la agenda del entrenador deportivista ha sido Pablo Trigueros. Al igual que De Camargo, el toledano ya estuvo a las órdenes del preparador blanquiazul, aunque en otro club. Ambos coincidieron en el Rápido de Bouzas en la campaña 2017-2018, en la que el central lo jugó prácticamente todo superando los 3.000 minutos. Además de la seguridad defensiva, Trigueros vivió con Jiménez la temporada más goleadora de su carrera, anotando nada menos que cuatro goles. Esa fortaleza aérea y su peligro a balón parado son dos de los motivos de su contración.