Juli: "Bordalás es top: te baila, te anima y es muy cercano"
Pocos conocen mejor al entrenador del Valencia como este jugador alcoyano. Coincidió con el técnico en cuatro equipos distintos.
Julián Cerdà Vicente (Alcoy, 1981) es uno de esos viejos rockeros que todavía sigue dando guerra. En agosto cumplirá 40 años y apura sus últimos días de fútbol en el Alcoyano, el club de su vida. Juli analiza con AS la presencia de José Bordalás en el banquillo del Valencia. El técnico ché fue su "padre deportivo". Además, Juli ha estado en cuatro equipos distintos con Bordalás: Alicante, Elche, Alcorcón y Alavés. Muy pocos conocen al técnico del Valencia como Juli.
Seguro que usted fue de las personas que más se alegró con el fichaje de Bordalás por el Valencia...
Sin duda. Me alegré mucho por Bordalás. El rumor pasó a ser una realidad. Veo a la afición del Valencia encantada y parece que se ha vuelto a ilusionar. Ojalá le vaya muy bien.
El fútbol también premia a la gente que viene del barro...
Al míster nadie le ha regalado nada. Ha pasado por todas las categorías del fútbol español, sin excepción. No sólo triunfan como entrenadores los exjugadores. El otro fútbol, el competitivo, el de ir a por todas y no dar nada por perdido, también da éxitos. Bordalás lo ha conseguido porque es capaz de sacar el 100% a sus jugadores.
¿Cómo cree que ha evolucionado Bordalás?
Seguro que ha evolucionado mucho, pero la esencia es la misma. Bordalás es trabajo y más trabajo. No por tener a un equipo de calidad o grandes jugadores tienes el éxito garantizado. Bordalás prefiere armarse con jugadores de equipo e inculcar su filosofía y psicología. Es muy cercano al jugador y capaz de llamarte para que vayas a su vestuario una hora antes del partido o incluso ir a su habitación de hotel. Desde el primer día está dando ánimos. Cuando llegó al Alavés nos reunió y el primer día nos dijo que íbamos a ascender. El Alavés venía de salvarse de milagro en Jaén y de un año sin pena ni gloria. Cuando dijo al grupo que íbamos a ascender, el capitán del Alavés me miró y me dijo: "está loco". Yo le respondí: "ya verás lo loco que está...". Y al final ascendimos.
¿Ve al míster llamando a Soler o Maxi a su vestuario?
Yo puedo hablar de lo que viví y le gusta tener todo controlado. No sé si aún lo hará y se llamará a Guedes, Soler... Pero seguro que mantiene su esencia y ese espíritu de estar cercano al jugador. Hay que recordar que se encuentra ante el mayor reto de su vida.
"Con Bordalás se verá otra vez la esencia de lo que siempre ha sido el Valencia"
¿Cómo le irá en el Valencia?
Yo creo que con Bordalás se verá otra vez la esencia de lo que siempre ha sido el Valencia, un equipo que va, gusta y no da nada por perdido. Muchas veces se ha dicho que sus equipos son el antifútbol. Yo he vivido dentro y Bordalás no fomenta eso jamás. Es cierto que trabaja al límite y es un obsesivo de la presión. Hace que tres jugadores vayan a tope para recuperar la pelota, pero no fomenta el juego agresivo ni las patadas. Se le ha tachado de eso de forma injusta. Seguro que su equipo le va a gustar mucho a la afición si es capaz de contagiar sus señas de identidad.
Seguro que también se ha curtido con 'jefes' complicados...
Cierto. En eso también ha aprendido mucho y está curtido en mil batallas. En Vitoria vivió una situación complicada porque tenía un año más de contrato garantizado con el playoff y al final no siguió pese a tener un contratazo.
Dicen que le gusta rodearse de jugadores de su plena confianza...
Sí. Ese núcleo es muy importante para Bordalás porque a lo largo del año hay altibajos y sabe que si está rodeado de su gente sale reforzado. El míster lo consensúa todo y te hace de los tuyos. Además, cuando haces un comentario no lo obvia y lo tiene en cuenta. Eso es muy importante para el jugador porque ves que el entrenador es cercano. Como máximo responsable del Valencia en el banquillo le deberían dejar hacer de todo.
Usted es íntimo de Jorge Molina. Sabrá esa relación especial que tiene Bordalás con los delanteros...
Sabe que un delantero es vital en su equipo y desde el primer día fomenta las jugadas en los entrenamientos. Acabas reventado de la sesión y te coge para seguir trabajando el remate, la finalización... Te corrige y con su tono te dice: "así no chaval, al palo largo, con el interior...". Te dice que si le haces caso vas a meter muchos goles y además siempre pone ejemplos reales, no vende humo. Siempre cuenta que Molina no le metía ni un gol al arcoiris y terminó pichichi con él. Al final, ves que tiene razón.
Entonces, ve a Maxi marcando 20 goles...
Perfectamente. Lo primero que le dirá es que es un delantero como la copa de un pino y hará que se lo crea. Luego, empezará con su discurso y los entrenamientos... Además, si tienes un buen coche es más fácil que las piezas se unan.
¿Y cómo ve a Javier Vidal?
El míster y él se entienden con la mirada. He conocido a muchos preparadores físicos, pero lo de Javi es espectacular. Se unen y forman el matrimonio perfecto. Cuando uno está tranquilo, el otro se altera. Si no, es el míster el que pincha a Javi o al revés. Es un tándem perfecto y los resultados están ahí.
Después de tanto tiempo al lado de Bordalás, ¿qué anécdota recuerdas?
Puedo contar mil. Con el míster, cada diez minutos hay una. Pero hay una gorda que siempre recordamos. Fuimos con el Elche a Anoeta y en el minuto 6 expulsaron a Bravo, el portero, y marco Molina de penalti. Fue un partido con viento, frío, lluvia... Llegamos al vestuario y en el túnel hubo una tangana al final. El míster entra al vestuario con cara de loco y empieza a darle patadas a las botellas. Y nos dice: "qué rabia, con el esfuerzo que habeis hecho y sólo hemos sumado un punto". Javier Vidal se lo llevó y le dijo que habíamos ganado. El míster no se acordaba y volvió a abrazarnos y tirarnos agua. Ese Bordalás es más top si cabe. Te baila, te habla, te cambia cosas en el vestuario... Sabe dónde Javi tiene que poner la botella de agua para darle una patada, ponen cara de locos... Insisto, son un tándem top.
¿Y eso no puede cansar al jugador?
Es posible que cuando lleve muchos años en un sitio los jugadores ya no lo vean igual o se cansen, pero es muy bueno para reactivar a un equipo. El Getafe estaba muerto y mire dónde acabó.
En agosto, cumple usted 40 años. ¿Piensa seguir dando guerra?
Por supuesto. Esta semana ya he empezado a entrenar para llegar bien a la pretemporada. Tengo un año más de contrato con el Alcoyano y estoy con ganas de que esto empiece. Se aproxima una temporada ilusionante y voy a seguir jugando al fútbol en Alcoy.
Salvo que le llame Bordalás para el Valencia...
(Risas). Iría andando si me llama Bordalás, es mi padre deportivo. Si el míster alza la voz y me llama, voy donde me pida.