Budapest aprieta a Wembley
La UEFA presiona al Gobierno británico para que suavice las medidas de entrada al país pensando en la 'Final Four' y baraja la aperturista Hungría como alternativa.
La UEFA ha lanzado un aviso a Reino Unido y amenaza con quitarle las semifinales y la final de la Eurocopa a Wembley si no se flexibilizan las restricciones de entrada en el país de aquí a las fechas programadas para dichos encuentros. Según el Times, el máximo organismo ya tendría incluso preparada una alternativa para disputar la Final Four. Se trataría de Budapest, única sede en la que no hay límite de aforo y cuyo primer encuentro registró un lleno casi total con 55.662 espectadores en la grada durante el Hungría-Portugal de la primera jornada del grupo F.
Las fuertes medidas de acceso al Reino Unido harían muy difícil la entrada de los 2.500 vips y personal de organización que se calcula que participarán de la Final Four, todos ellos con nacionalidades que no son la británica y por lo tanto obligados a cumplir una cuarentena al entrar en el país. A pesar de que ya se están haciendo excepciones con los jugadores y trabajadores en los partidos que se están disputando en Wembley, ampliar esto a casi 3.000 personas es lo que inquieta a la UEFA y pone en jaque al Gobierno de Boris Johnson, que tendría que hacer la vista gorda ante un gran número de personas si es que decide no suavizar las medidas actuales. Aunque sería un cambio drástico porque quedan apenas dos semanas para que se produjese, la UEFA ya ha actuado con ese margen de tiempo últimamente en otras competiciones como la final de Champions de esta temporada o incluiso la designación definitiva de las sedes de la Eurocopa.
Sin Wembley. La negativa inglesa a suavizar sus medidas de acceso al país ya supuso que la final de la Champions no se jugara en Wembley y pasara a Oporto, una vez se descartó Estambul. A pesar de que eran dos equipos ingleses los que la disputaban, los problemas que se encontró la UEFA para trasladar a sus patrocinadores, vips y empleados le hizo mirar para otro lado y descartar la sede inglesa. Algo parecido podría pasar ahora en la Eurocopa, que además ha servido para normalizar la presencia de aficionados en los estadios de cara a la opinión pública.
De hecho, Budapest, la alternativa que maneja la UEFA, ha sido uno de los bastiones del organismo en su lucha por recuperar el fútbol como antes se entendía. Aquí se jugaron encuentros de Champions con equipos ingleses inmersos, como las eliminatorias de octavos entre Liverpool y RB Leipzig o entre Manchester City y Borussia Monchendgladbach. También se jugaron encuentros de la Europa League, entre ellos el Molde-Granada, además de la Supercopa de Europa del pasado verano entre Bayern y Sevilla. A la UEFA le gusta y presiona con ello. El Gobierno británico tiene la palabra.
Único estadio al 100% de aforo
El Puskas Arena es el único de cuantos estadios acogen la Eurocopa que no tiene limitación de aforo. El Gobierno húngaro permite el 100% del aforo. Eso sí, de los 68.000 que tiene ha quedado reducido a unos 56.000 porque la zona de prensa ocupa buena parte de la tribuna, además de otros espacios que se han reservado a patrocinadores y para asuntos comerciales.