Roberto Martínez tiene varios dilemas en Bélgica
Castagne será operado al llegar a Bélgica, mientras que Vertonghen tiene molestias en el tobillo. Debe decidir también cuándo juegan WItsel y De Bruyne.
El estreno de Bélgica en la Eurocopa, con un contundente 3-0 a Rusia en San Petersburgo, fue esperanzador. Pero a la vez dejó preocupación en el cuerpo técnico de los Diablos Rojos por los jugadores lesionados. Han perdido definitivamente a Timothy Castagne, que ha regresado a Bruselas junto al resto de sus compañeros para ser operado de la fractura de pómulo que sufrió tras un escalofriante choque.
El otro que terminó tocado es Vertonghen, aunque en su caso las noticias son mejores: su cambio en la segunda parte fue por precaución después de un fuerte golpe en el tobillo. Está pendiente de evolución y es duda para jugar el jueves ante Dinamarca en Copenhague (18:00 horas, Cuatro), pero su lesión no es de gravedad.
A estos dos futbolistas hay que unirles a Witsel y De Bruyne, dos de las piezas clave de la selección que no pudieron participar en el primer partido. El primero se rompió el tendón de Aquiles en enero y reaparecerá el jueves ante Dinamarca, un partido antes de lo previsto. El segundo vuelve ya a entrenarse con el grupo, aunque optarán por la prudencia después del buen resultado del debut. Lo principal es que llegue al 100% a los cruces, porque ahora mismo la opción de que Bélgica no pase de fase es muy remota.
La mejor noticia es el rendimiento colectivo de todos. Roberto Martínez destacó el rendimiento de Meunier, que sustituyó a Castagne. Además, tampoco Hazard, el capitán, estuvo desde el inicio. A pesar de todos estos contratiempos, los belgas comenzaron el torneo con gran autoridad.