"La primera camiseta de Nino fue de la Real porque del Madrid no encontré"

El padre de Nino, Bernardino Martínez, habla de la retirada de su hijo a los 40 años. El jugador récord de la Segunda División y del fútbol español cuelga las botas rodeado de mensajes cariñosos de todas las aficiones. Ahora le ve futuro como entrenador porque el fútbol "es su mundo".

¿Con qué se queda de la carrera deportiva de su hijo?

Con la gran cantidad de mensajes de cariño que nos han llegado desde toda España. Leer lo que decían las redes sociales ha sido muy bonito y emocionante. Sólo podemos dar las gracias por todo lo que ha conseguido como futbolista y como persona.

¿Cómo comenzó a jugar al fútbol?

Con dos años le compré su primera equipación de la Real Sociedad. Quería una del Real Madrid, porque en la familia somos merengues de toda la vida, pero no la encontré. Y ese año (temporada 81/82), la Real ganó la Liga.

¿Cuándo comunica Nino a su familia que va a colgar las botas?

Hace tres semanas, antes de que finalizara la Liga. Nino me dijo: "Papá, lo voy a dejar". Entonces no quiso decir nada porque el equipo se estaba jugando la salvación en Primera y él no quería ser protagonista.

¿Con qué se queda?

Con muchas cosas: con su debut contra el Real Murcia, con su primer gol al Figueres, o que le hizo al Melilla para subir a Segunda, o los que hace poco marcó al Sporting B o Real Zaragoza... Han sido tantos que sería difícil resaltar alguno en concreto. En la balanza hay muchas más alegrías que penas.

Penas, pocas...

La lesión de rodilla que sufrió en Osasuna fue el golpe más duro que hemos sufrido en la familia, pero él, tirando de esa fuerza y esa garra que tiene, salió hacia adelante como siempre ha hecho. Y así ha llegado hasta los 40 años jugando.

¿Dónde ve a Nino en el futuro?

Cerca del verde. El fútbol es su mundo y es donde quiere estar. Me ha dicho que le gustaría ser entrenador y yo le veo madera. Cuando vemos fútbol siempre me hace observaciones tácticas; le noto que le gusta.

¿Le ve futuro como entrenador?

Por supuesto que sí, es lo que le gusta. Ahora quiere estar cerca del fútbol base y más adelante ya se verá.

¿Cuántos Nino hay en la familia?

A mis tres hijos y a mí nos llaman Nino por el diminutivo de mi nombre (Bernardino). Estoy muy orgulloso de mis tres hijos. Juan Francisco es el mayor y el pequeño, Antonio Jesús, también jugaba pero lo dejó hace un par de años. Yo nunca jugué al fútbol, pero mi mujer Pura y yo siempre les apoyamos en lo que pudimos.

¿Por qué Nino no se quedó en el Real Madrid?

Dicen que porque era pequeño, no lo sé. Querían cederle al San Sebastián de los Reyes y me lo traje para Vera, donde empezó a jugar. Y entonces apareció el Elche, que ha marcado su carrera, como el resto de equipos donde ha jugado y de los que guarda un gran recuerdo, por supuesto que sí.

¿Estará este miércoles en su despedida?

Lo seguiré desde la distancia, por internet. Tengo que trabajar porque soy conserje en un colegio y con esto del COVID no puedo faltar...

A trabajo, a ustedes, no les gana nadie...

Trabajo y esfuerzo, esa es la clave. No hay otro secreto.

Tiene cuatro nietos y una nieta. Al mayor, Alejandro, ¿le ve como sucesor de Nino?

Salvando las distancias y evitando las comparaciones, que no son buenas, tiene cosas parecidas y algunas que son mejores: es fuerte, alto, corpulento y le pega fuerte al balón. Si me preguntas a mí, yo te digo que sí tiene futuro.