Ramos espera la última llamada
El central sigue queriendo retirarse en el Madrid y esperará hasta el final. Por su parte, el club entiende que ya ha tomado su decisión y trabaja en una despedida a lo grande.
Sergio Ramos, 35 años, finaliza su contrato con el Real Madrid dentro de 22 días. El capitán blanco todavía está en su domicilio madrileño con la esperanza de una última llamada, la de Florentino Pérez, en lo que puede ser el último intento por desbloquear una renovación que, como ya informó AS el pasado fin de semana, está en punto muerto. El problema es que en las dos tentativas anteriores que hizo el presidente directamente con el sevillano, el 30 de diciembre y en marzo, aprovechando el partido de Champions con el Atalanta, en ambas ocasiones Ramos rechazo la oferta a la baja del club: un año de renovación, con el 10% de rebaja incluido.
Sergio entendía que el problema no era tanto el dinero, sino de "respeto y años" después de tanto tiempo remando y liderando al equipo en circunstancias no siempre favorables, como el año pasado cuando se echó al equipo de Zidane a la espalda para ayudarle a ganar la llamada 'Liga del Coronavirus'. Ramos considera que dos años (más uno opcional por objetivos) era una manera de reconocerle los servicios prestados y ayudarle a finalizar a lo grande su carrera en la elite en el Real Madrid.
Esas dos negativas fueron entendidas por el club como un descarte definitivo a seguir en el Madrid. De hecho y según informó Josep Pedrerol en el Chiringuito, cuando en marzo rechazó la oferta le dijo Florentino al capitán "entonces tendré que planificar la plantilla sin ti", a lo que el jugador respondió "hazlo". Desde entonces la postura del Madrid es que ya no hay caso Ramos porque lo dan por zanjado, hasta el punto de que han hecho oficial el fichaje de David Alaba, único consumado hasta la fecha, y que han deslizado que el deseo del presidente es que Sergio Ramos tenga una despedida como se merece por su increíble trayectoria en el club desde 2005, posando con los 22 títulos que ha conquistado de blanco desde que llegó del Sevilla siendo un crío de 19 años (además fue el primer fichaje español de la era Florentino).
El mandatario madridista no quiere que se repita lo de Cristiano o Casillas, el primero despidiéndose con una simple carta a los aficionados y el segundo con una triste rueda de prensa, con lágrimas incluidas, que al menos fue rectificada al día siguiente con un acto en el césped del Bernabéu acorde con la leyenda del portero madrileño.
Hasta el último momento
Pero Ramos, por encima de todo, quiere apurar sus últimas opciones de seguir en el Madrid. Por eso espera esa llamada y esa última conversación con Florentino. La rebaja ya no es problema (la aceptará seguro) y si le ofrecen el año de renovación que le pusieron sobre la mesa en la primera reunión también lo aceptaría. Las renovaciones de sus compañeros y amigos, Modric y Lucas Vázquez, así como la llegada de Ancelotti, con el que siempre tuvo un gran feeling, le animan también a seguir. "Pero ya no depende de él", explican en el entorno del jugador. "Sergio quiere seguir en el Madrid y retirarse aquí, pero la decisión ya no pasa por él", concluyen.