Vadillo, el último del ascenso
El extremo, que llegó al Espanyol el día en que se cerraba el mercado de verano, también fue el jugador con menos minutos de la temporada, apenas un 5%.
Llegó el último día de mercado en una jornada estresante para el Espanyol, en la que la dirección deportiva buscaba un extremo para ponerle la guinda a la plantilla más cara de la historia de la categoría. Primero sonó con fuerza Hernani Santos, del Levante, pero finalmente la operación no progresó. Apareció entonces Álvaro Vadillo, fichado ese mismo verano por el Celta, pero que no convenció a Óscar García, técnico por aquel entonces del club celeste. "Era una oportunidad de mercado", comentó Francisco Rufete.
Pero Vadillo se despide de la temporada con la menor participación de la plantilla del Espanyol: solamente participadó 196 minutos, lo que representa un cinco por ciento del total, sin partidos de titular en LaLiga SmartBank. Una vez adaptado, el gaditano debutó en la quinta jornada ante el Alcorcón, cuando disputó 17 minutos. Tuvo continuidad como recambio hasta la jornada 9, donde acumuló 69 minutos, pero una inoportuna lesión le dejó inactivo el resto de la primera vuelta.
Ante el Girona, en la jornada 22, regresó al equipo. Habían pasado dos meses y medio y el Espanyol empezaba una mala racha, quizás el momento de mayor dudas de la temporada. Regresó Vadillo en la ola buena, ante Fuenlabrada y Castellón, donde acumló 54 minutos. Pero lo que pareció una resurrección para el tramo final del campeonato se convirtió, nuevamente, en un periodo de suplencias prolongadas: siete encuentros estuvo Vadillo sin jugador, en los que el Espanyol certificó el ascenso.
Regresó ante la Ponferradina y despidió el curso ante el Alcorcón. El jugador ha sido un testimonio del ascenso, en el que no ha podido colaborar demasiado al no contar con minutos. El Espanyol ejecutó la cláusula de compra obligatoria en caso de regresar a Primera, por lo que el extremo seguirá de perico, ahora ya en propiedad.