El 98% de los resultados en Liga del Girona le harían finalista
Los rojiblancos firmaron un 3-0 en Montilivi y les da mucho aire para afrontar la vuelta en Almería. Sólo repetir la derrota que cosecharon en Lugo (3-0) les eliminaría del playoff.
Orgullo, paciencia y nada de confianza. Estas fueron las claves del mensaje que ofreció Francisco a sus jugadores tras vencer 3-0 al Almería en el duelo de ida de la semifinal del playoff. El técnico alabó el trabajo y esfuerzo realizado por sus futbolistas para pasar por encima del conjunto indálico, pero rápidamente les instó a pensar en la vuelta. Están a sólo 90 minutos, en el mejor de los casos, de alcanzar la final, aunque cualquier momento de duda o error les puede complicar la clasificación. El 3-0 es un resultado que “habríamos firmado todos antes de empezar el partido” y se deberá hacer bueno en Almería. Toca confiar en un grupo que está acabando el curso a un nivel espectacular y que, además, está mostrando un nivel de fiabilidad altísimo.
La labor de Francisco desde que llegó el curso pasado al Girona está siendo excelente y es que le ha otorgado al grupo un gen competitivo que le está llevando a ser intocable. Encadena nueve duelos sin perder (ocho victorias y un empate) y los números le permiten afrontar la vuelta con optimismo. Porque de los resultados obtenido en Liga, el 98 por ciento le harían finalista. O lo que es lo mismo, de los 42 marcadores cosechados entre Montilivi y a domicilio, únicamente uno le dejaría fuera de los playoff. Sería el 3-0 que les endosó el Lugo en el Anxo Carro en la jornada 7. Dado que en estas eliminatorias de promoción no hay penaltis, si se llegara al final de la prórroga con un 3-0 favorable al Almería pasarían los andaluces a la final. Les favorecería haber quedado mejor clasificados que los gerundenses. De ahí que un exceso de confianza pueda llevar algún susto.
Mantener la tensión competitiva en un playoff en el que el margen de error es mínimo se antoja crucial y si en algo está incidiendo Francisco es en ello. Pero hay más datos que permiten al Girona confiar en que el primer equipo rojiblanco disputará su segunda final de playoff de manera consecutiva y es que en los últimos ocho encuentros, únicamente han recibido dos goles. El sistema defensivo funciona y en el partido del pasado miércoles ante el Almería no dejaron disparar al rival a portería. Los únicos dos tiros que recibió Juan Carlos se marcharon fuera.