Adriano sobre jugar con Lukaku: "Imagínalo... ¡madre mía!"

Ya hace algo más de una década de que un jugador del Calcio fue un auténtico ídolo para los adolescentes de los 90. Ese no fue otro que ‘El Emperador’, apodo que recibía un futbolista brasileño de un poderío físico y disparo desde larga distancia potentísimo. Todo ello multiplicado por bastante más en los videojuegos (en el Pro Evolution Soccer 6 concretamente, en el que sería portada). Aquel fue Adriano Leite, quien maravilló a todos con su zurda durante su etapa en el fútbol italiano.

Sus mejores años llegaron de la mano del Parma y, posteriormente, del Inter. Precisamente, fue con los neroazzurri donde dejó mejor recuerdo, con aquellos golazos en el Giuseppe Meazza. Ahora, 15 años después, Adriano se sigue acordando del que es “su” equipo en el Calcio. Lo hizo después de que el Inter ganara el Scudetto tras una década de sequía. Por ello, el brasileño, en una entrevista con la Gazzetta dello Sport, quiso felicitar al conjunto que dirige Antonio Conte.

Eso sí, son ya innumerables los casos de comparación entre Adriano y Romelu Lukaku. Tanto es así que el brasileño no esconde que ya tiene incluso amistad con el delantero belga, al que ya le considera su sucesor en el Inter. “Lukaku es mi heredero, estoy muy orgulloso. Qué pareja habríamos hecho en el campo. Imagínalo… ¡madre mía! He hablado con él y lo invité a venir aquí a Río cuando termine la pandemia”, señaló ‘El Emperador’.

“Romelu es muy parecido a mí en todos los aspectos. Ya no solo por su potencia física y su zurda, sino también por la humildad y el vínculo con su familia. Es único y técnico. Nadie puede pararlo”, añadió Adriano. Por otro lado, desvela en qué momento se conocieron ambos, confesando que lo hicieron a través de la red social de Instagram. “Nos conocimos a través de un directo en Instagram organizado por el Inter durante la cuarentena. Nunca habíamos hablado antes. A partir de ese día nos empezamos a enviar mensajes. Él también habla portugués”, puntualizó. Un futbolista ‘El Emperador’ que, debido a los problemas extradeportivos (sobre todo familiares), acabó dejando el fútbol antes de lo que nos hubiese gustado a todos.