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GRECIA

Piti: "Me alegra que los jugadores de mi edad continúen dando guerra"

El extremo cumplirá los cuarenta la próxima semana, pero se siente pletórico y quiere seguir jugando un año más. Podría quedarse en Grecia. "No le cierro la puerta a nada", confesó a AS.

Piti: "Me alegra que los jugadores de mi edad continúen dando guerra"
@10Piti

Apenas una semana le separa de los cuarenta. Piti soplará las velas el próximo miércoles 26 y tiene bastante claro qué deseo formulará: seguir jugando al fútbol. Gasolina no le falta a este extremo incombustible, que el pasado mes de enero regresó al Lamia para luchar por la permanencia —"teníamos sólo siete u ocho puntos y la situación era bastante complicada", recuerda—  y cumplió el objetivo dos jornadas antes del final. El catalán se siente pletórico, de cuerpo y mente, por lo que seguramente continuará en activo un año más en Grecia.

No hay pócima secreta para su eterna juventud, sólo la ilusión por el balón y el trabajo del día a día. "Todavía me encuentro físicamente bien y me planteo seguir jugando una temporada más. No le cierro la puerta a nada. Hace poco acabé el curso de entrenador y tengo el título porque es algo que me gusta. Quiero estar ligado al fútbol y cerquita de la pelota. Cuando tome la decisión de retirarme, algo que aún no he hecho, me veo entrenando", confiesa a AS.

El caso de Piti no es un hecho aislado. Cada vez es más frecuente ver a jugadores veteranos interpretando papeles protagonistas, como Nino (Elche, 40 años), Joaquín (Betis, 39) o Jorge Molina (Granada, 39), en Primera y Rubén Castro (Cartagena, 39) o Yuri (Ponferradina, 38), que están entre los máximos artilleros de Segunda. El fútbol está cambiando. "Me alegra que los futbolistas de mi edad continúen dando guerra. Al final esa decisión la tienes que tomar tú y no dejar que otros la tomen por ti. Nadie te tiene que retirar, el que te retiras eres tú. Es algo muy personal y, si te encuentras bien, la edad no deja de ser una cifra", esgrime.

Hay clubes del ayer que hoy siguen muy presentes en la vida de Piti. "No me pierdo ni un partido del Rayo", ríe. No hace falta que lo jure, simplemente basta con escuchar su análisis del conjunto de Iraola. "Lo encuentro muy irregular. Ha tenido partidos buenos y parecía que iba a tirar para arriba y de pronto sufría una recaída muy grande. No sé el motivo porque tiene una gran plantilla. Espero que pegue ese último arreón para entrar en el playoff", explica uno de los futbolistas más queridos por la afición vallecana. Y de los actuales, ¿con quién se queda? "Bebé estaba dando muchos puntos y ha vuelto a ser ese jugador especial que todos conocemos. Trejo está espectacular. Me gusta que Montiel haya tenido más minutos y me alegraría mucho la vuelta de Alberto García. A ver si de una vez por todas se recupera y puede jugar algo".

Su voz le delata cuando habla del Rayo: "Es el club de mi vida, donde he conseguido todos los éxitos. La primera vez que pisé Vallecas supe que no quería moverme de allí. Me ha marcado el barrio, la afición… Llegar a Primera fue especial, también conseguir el histórico octavo puesto, he marcado goles que han significado mucho… Lo he vivido todo, bueno y malo". También habla con cariño de Zaragoza —"Ojalá los próximos años podamos verle peleando por algo más que la permanencia. Viéndole te haces una idea de lo difícil que es la Segunda"— y Granada —"Tiene un grandísimo equipo, Diego Martínez ha hecho un bloque espectacular y posee jugadores de calidad. ¿Su secreto? Trabajo, trabajo y trabajo. Ves a los futbolistas muy implicados sobre el césped. Soldado, Jorge Molina… han rejuvenecido"—.

A su paso por LaLiga le siguieron sus aventuras por Chipre (Limassol), Grecia (Lamia y Larisa), India (Jamshedpur)... Precisamente, de este último destino sigue preocupado las noticias que llegan sobre la pandemia. "Tengo compañeros con los que jugué allí y la situación es bastante mala. Han estado prácticamente en un hotel encerrados, saliendo sólo para entrenar y jugar. La COVID-19 está pegando fuerte en el país y tienen un poco de miedo. El virus está afectando a mucha gente, hay muchos muertos y temen que les pase a ellos", relata, mientras desempolva algunas de sus instantáneas en India: "Me imaginaba un fútbol diferente, con los estadios a medio hacer, y al contrario, eran de cinco estrellas. Repletos de afición, con una pasión increíble y un respeto máximo al deportista. Fue una experiencia única".

El futuro más inmediato de Piti está sobre el verde y confía en que el siguiente paso sea dirigir a un equipo. "Veo a muchos compañeros de entrenadores y es una faceta que me gusta, a la que deseo dedicarme en un tiempo. Ojalá se me dé la mitad de bien de lo que se me ha dado como jugador", sueña. Por si acaso, también alimenta su vena emprendedora: ha abierto una clínica de fisioterapia (‘In Fisio Veritas’) y se metió en la directiva del Atlético Pinto, una experiencia amarga que está en los tribunales.

"Me propusieron entrar en el proyecto junto a Gabi Moya, Acosta… y confiamos en un abogado que nos la jugó. Introdujo unos papeles en contra nuestra, erigiéndose como una especie de socio protector del club, sin que nos enteráramos para que su despacho se hiciera con el control. Espero que cuando salga el juicio se demuestre todo", manifiesta con amargura. Para este proyecto quiso contar con otros míticos de la Franja: "Armenteros todavía estaba para jugar, contacté con Sonia Bermúdez, con Natalia… para reforzar la sección femenina y una cantera que se hiciera un nombre en el fútbol madrileño". Un final feliz para esta historia, ese es otro deseo para el momento de soplar sus cuarenta velas...