El Besiktas gana la Copa y firma el tercer doblete de su historia

El Besiktas superó 0-2 al Antalyaspor y se proclamó campeón de la Copa de Turquía para conseguir el tercer doblete de su historia tras ganar la Liga el pasado fin de semana. El equipo de Sergen Yalçin ha culminado semana mágica que comenzó este sábado con un final de infarto de Liga tras una pelea codo a codo con el Galatasaray que se decantó del lado del Besiktas. Acabó en la primera posición de la Superliga gracias a la diferencia de goles particular, con un tanto más a favor que su gran rival. Días después, tras un par de jornadas de celebraciones, el Besiktas debía afrontar el último partido del curso.

La final de Copa podía servir de broche final a una campaña exitosa de "las Águilas Negras", que en toda su historia sólo habían ganado Liga y Copa en una misma temporada dos veces, en 1990 y en 2009. No desperdiciaron la oportunidad y los hombres de Yalcin no fallaron ante un rival que jamás había ganado el título. De hecho, el Antalyaspor sólo llegó a una final, en el año 2000, y la perdió 5-3 con el Galatasaray. El rival del Besiktas pagó su inexperiencia y se quedó sin título tras perder con claridad en el Gürsel Aksel Stadyumu de la localidad otomana de Izmir. Con un par de tantos en la primera parte, el Besiktas sentenció la final. Primero, a los tres minutos, acertó el brasileño Josef de Souza, que aprovechó un rechace dentro del área para batir al portero belga Ruud Boffin. Después, a la media hora, el francés Valentin Rosier encarriló la victoria tras culminar un contragolpe que prácticamente sentenció la final. En las segunda parte, el Besiktas aguantó sin problemas los intentos del Antalyaspor, que incluso estuvo a punto de recibir el tercero con un remate de Rachid Ghezzal que se marchó por encima del larguero.

Curiosamente, dos de los jugadores que menos han marcado este temporada en el equipo, dieron la victoria al Besiktas. Ambos sumaban dos tantos este curso, muy lejos de los 23 del canadiense Cyle Larin o de los 16 del camerunés Vincent Aboubakar. Pero, sus aciertos, sirvieron para firmar un doblete histórico.