FINAL CHAMPIONS (F) | CHELSEA - BARÇA
Chelsea - Barcelona: qué presupuesto manejan los dos finalistas de la Champions Femenina
Inglesas y españolas se miden en el gran pulso por el primer trofeo de la Champions de ambos equipos, tras años de gran apuesta por el fútbol femenino.
Barça y Chelsea se medirán mañana (21:00, en Gol TV) en la final de la Champions femenina con el objetivo de levantar su primer trofeo continental. Una meta a la que llegan tras varios años apostando fuerte por esta categoría. Pero, ¿qué presupuestos barajan los dos finalistas europeos? Las cifras distan de las que se suelen tratar para el fútbol masculino. Pero, aún así, destacan por encima de otros rivales nacionales, tanto en España como en Inglaterra.
El Barça, por ejemplo, tiene un presupuesto que ronda los seis millones de euros para el ejercicio de la temporada 2020-21. Se trata de la cuantía más alta de los equipos de la Primera Iberdrola y de una cifra inferior a la de su próximo rival europeo, el Chelsea. El cuadro londinense cuenta con un presupuesto anual que gira alrededor de los siete millones de euros, un kilo superior al equipo azulgrana. En el caso de este último, un gran monto de este presupuesto se destina a salario, con una cifra estimada de cuatro millones y una media de 150.000 euros por jugadora.
Hasta ahora, la sección femenina del Barça era autosuficiente y no dejaba pérdidas en las arcas azulgranas. Sin embargo, para el ejercicio actual se espera que las cuentas salgan en negativo por poco más de un millón. Y, ¿de dónde vienen los ingresos? En el caso del conjunto catalán el peso de este dinero lo tienen los patrocinadores, con Stanley a la cabeza como sponsor principal y otras marcas como Nike, Caixa, Coca Cola, Naulover y Cupra. Además, se obtienen ingresos de los derechos televisivos (alrededor de un millón).
El Chelsea también dedica una gran parte de su presupuesto a salarios. El equipo inglés, que protagonizó el pasado verano el traspaso más caro de la historia del fútbol femenino europeo (pagó 350.000 euros por Harder al Wolfsburgo), tiene en su plantilla a una de las jugadoras mejor pagadas del mundo (Sam Kerr, con un contrato de un millón de dólares por dos temporadas) y ha reforzado en los últimos años los sueldos de su plantilla de cara a ser más profesional. Lo ha conseguido, al igual que lo ha hecho el Barça. Ambos llegan a la final de la Champions como campeones de Liga en Inglaterra y España con un gran nivel.