'Yo soy perico': documental que brota del corazón del Espanyol
Este viernes a las 23:00 se estrena en #Vamos un reportaje que repasa la historia del club con la voz de sus protagonistas. Marañón y Solsona, los padrinos.
Una semana después de conseguir el ascenso en La Romareda y demostrar, una vez más, que el Espanyol y el sentimiento de su gente son indestructibles, #Vamos de Movistar estrenará este viernes (23:00) el documental 'Yo soy Perico', que intenta repasar la historia del club para entender su singaluridad a través de las voces de más de una veintena de protagonista: ex jugadores, jugadores y pericos ilustres de todas sus latitudes. "No todo el mundo nace para ser perico", sintetiza el economista y ex consejero José María Gay de Liébana.
Este jueves se estrenó para los periodistas el documental con la participación de dos jugadores ilustres que también opinan, como son Rafa Marañón y Dani Solsona, ejemplo idóneo de lo que es el Espanyol y su magia: el noi de Cornellà fue perico porque "era lo que veía en mis casa, por mis padres. De hecho, mi padre hasta me criticaba cuando jugaba mal". Mientras que Marañón, el máximo goleador de la historia del club, natural de Olite (Navarra), descubrió el sentimiento perico cuando recaló en el club en los años 70 y nunca se desprendió de él. Su hijo Carlos, que jugó en las categorías inferiores, es otro confeso seguidor del Espanyol, una religión: "Dios nos escoge", sintetiza Gay de Liébana.
Por el documental pasan jugadores como Raúl Tamudo, Nico Melamed, Óscar Melendo; publicistas reconocidos como Toni Segarra, Josep Maria Piera o César García (el inventor de la Maravillosa Minoría), quienes le dan mérito a Gerard Piqué por acordarse siempre del Espanyol; ex jugadores como Moisés Hurtado o Thomas N'Kono; empleados o periodistas como José María Calzón o Tomás Guasch, todos ellos acompañados por Araceli Pérez (Federació de Penyes), Ander Mirambell o las jugadoras Anair Lomba o Verónica Boquete. En el documental, bien hilado por Juanma de la Casa y Sergio Sánchez, se tratan los tres estadios, los ídolos como Zamora, Parra o Di Stéfano, que sintetiza Guasch en una frase: "Pocos equipos podrían tener un once como el del Espanyol si cogemos a los mejores jugadores".
Pero también hay espacio para las alegrías de las copas (2000 y 2006) para las lágrimas de las derrotas, como la de Leverkusen o la de Glasgow, inigualables a las derramadas (y que aún brotan), por el fallecimiento de Dani Jarque en 2009, y que Thomas N´Kono y Moisés Hurtado definen también. "Fue más impactante que la muerte de mi padre", dijo el actual entrenador del Figueres.
Los autores, ajenos a la actualidad del Espanyol, reconocen la "resistencia" de su gente ante un gigante como el Barcelona, que lo absorbe todo. "Todas las aficiones aseguran que el sentimiento por sus equipos es especial, pero en el caso del Espanyol tiene un componente diferente al resto, hay una resistencia mayor". Esta noche, es imperdible el 'Yo soy perico' después del Espanyol-Cartagena.