'Superlucha' de la Real Sociedad por Europa ante el Celta
Los de Imanol necesita la victoria tras cinco jornadas sin ganar contra un Celta en situación cómoda para seguir optando a la quinta plaza.
Como estamos con la dichosa Superliga a vueltas, que nadie tenga duda de que la Real Sociedad tiene este jueves una superlucha contra el Celta para mantener vivas sus aspiraciones europeas de la próxima temporada (sigue el partido en directo en AS.com). Porque los txuri-urdin sí se lo tienen que ganar en el campo, no como otros que se sacan ases de la manga para asegurarse sí o sí viajar por Europa cada año. La Real no, la Real tiene que hacer méritos, y eso pasa por quedar quinto o sexto, y para ello debe ganar al Celta en el Reale Arena. Porque los de Imanol llegan atascados a la cita, con otra racha negativa de cinco partidos seguidos sin ganar. Y el Celta de Coudet, que es como el doctor Jekyll y Mr. Hyde, no perdona; porque atraviesa una situación clasificatoria lo suficientemente cómoda como para pensar en jugar casi sin presión.
Eso sí, que nadie se confíe, porque el equipo vigués quizá esté ante su última oportunidad de engancharse a esa pelea por jugar en competición europea la próxima temporada. No en vano, en caso de ganar en el Reale Arena, el Celta se colocaría a solo seis puntos de la Real, con 18 puntos por jugarse. Sería complicado, pero no imposible. Y para estar en esa tesitura lo primero será ganar a la Real. El partido, por tanto, para la Real encierra una encrucijada de importancia: ganar para seguir optando a esa lucha por ser quinto, y de paso para evitar meter a otro equipo más en la pelea continental. Que ya son suficientes con Betis y Villarreal.
Imanol no recupera a ninguno de los jugadores lesionados en la última jornada, así que se ha visto obligado a repetir la misma lista de convocados. Porque los jugadores del filial que habitualmente van con el primer equipo, Ayesa, González de Zarate y Pacheco, están confinados por el brote de coronavirus del Sanse. 19 jugadores escasos en la lista, y sobre todo sin Silva y Merino, sin los que la Real hace mucho menos daño a sus rivales. De hecho, sin el canario la Real apenas sabe lo que es ganar. Y esta vez el triunfo es urgente, porque es demasiado tiempo sin probar su sabor y hay que estar bien posicionado en el tramo decisivo de la temporada. Las castañas de verdad empiezan a jugar desde ya. La superlucha ha comenzado.