ALEMANIA
El mercado afecta a Haaland
El ruido de los rumores no le ha sentado bien al noruego. Desde que tenía 17 años en el Molde, nunca había estado siete partidos seguidos sin ver puerta.
Ningún nombre ha sido más repetido en los periódicos, tertulias, programas, conversaciones de bar e informativos deportivos, en estos últimos meses que el de Erling Braut Haaland (20). Aquel joven que saltó a la fama en el verano de 2019 tras marcar nueve goles en un partido del Mundial sub 20 y a los pocos meses debutar con un hat-trick en Champions, se enfrentaba este año a su primera temporada completa en la élite.
Aunque las expectativas eran altas, el noruego las rompió con una facilidad pasmosa. Sus 33 goles (10 en Champions) y 10 asistencias en 35 partidos, además de exhibiciones como ante el Sevilla donde metió un doblete en cada partido de la eliminatoria de los octavos de final, le convirtió en el hombre de moda y en la prioridad para los más grandes de Europa.
El ojito derecho de Europa
Su próximo salto en su meteórica carrera siempre había estado sujeto al supuesto acuerdo verbal entre el Borussia Dortmund y Mino Raiola (agente del noruego) por el cual el delantero tendría una cláusula de 75 millones en el verano de 2022. Pero su rendimiento y la evidencia de que está para ser la estrella de cualquier equipo del mundo, hicieron que las reglas del juego cambiasen y se hablase de una salida este mismo verano.
En ese escenario, Raiola declaró en The Athletic que fue demasiado cuidadoso llevándolo al Dortmund abriendo su puerta de par en par, "este chico puede ir a cualquier equipo, va más rápido de lo esperado". Al poco tiempo, el agente y el padre de Haaland visitaron España para reunirse con el Madrid y el Barça. Todo ello coincidiendo con uno de los momentos más complicados para el noruego.
Siete partidos, su peor sequía goleadora
Todo este ruido mediático parece que no está sentando del todo bien a Haaland. Desde que marcó un doblete ante el Colonia en un partido que terminó en empate y en el que se mostró visiblemente cabreado, Haaland no ha vuelto a ver puerta. Un total de siete partidos en casi un mes que suponen superar la peor racha que tuvo en el Salzburgo (seis partidos, tres con Noruega sub-21 y tres con su club) e igualan su mayor periodo de sequía, la que tuvo en el Molde con tan solo 17 años entre septiembre y noviembre de 2017. Muchos partidos sin marcar para un jugador que desde luego no está acostumbrado a ello.
Todo empezó con su llegada a la Selección noruega, con toda España con un ojo a su concentración en Marbella, donde no fue capaz de anotar en ninguno de los tres partidos a pesar de enfrentarse a rivales como Gibraltar, Turquía y Montenegro. A su vuelta a Alemania se esperaba ver de nuevo su versión más killer pero no anotó en la dura derrota ante el Eintracht que complica al Borussia la clasificación a la Champions League. Tampoco lo hizo en la victoria ante el Stuttgart. Ni siquiera ante la llegada a su competición fetiche, la Champions donde es pichichi con 10 goles y ha roto todos los récords con 20 tantos en 16 partidos, Haaland ha sido capaz de ver puerta.
Entre los rumores de fichaje por el equipo que defendió su padre durante tres temporadas, Haaland ha mostrado su versión más vulnerable en Champions. El City de Guardiola ha sabido frenarle como nadie, dejándole la dupla Stones-Dias con tan solo un tiro a puerta en la ida y sin ni siquiera chutar entre los tres palos en la vuelta. Por primera vez en esta edicción el noruego se quedaba sin marcar como local.
Humanizando al 'cyborg'
Acostumbrado a brillar como nadie, su bajón no pasa desapercibido y su entrenador, Edin Terzic, no dudó en salir a defender a su pupilo tras la eliminación, explicando que no era la causa del mal momento del equipo. "Siempre pensamos que Erling marca como quiere en todos los partidos. Pero es una persona y un jugador joven. Siempre hay momentos en los que no marcas. Pero ese no es nuestro problema. Juega muy bien. Si miras el gol que marcamos hoy tuvo un papel importante protegiendo el balón y corriendo los espacios".
Este domingo ante el Werder Bremen Haaland puede firmar su peor racha goleadora en su corta carrera. Con la eliminación de Champions están obligados a ganar para seguir luchando por ese cuarto puesto que les permita volver a la mayor competición europea la temporada que viene. Algo que se antoja fundamental para que el noruego se quede. Rompa su sequía o no, es fácil pensar que todo el ruido mediático de estas últimas semanas, donde ha sido el protagonista absoluto de los rumores de fichajes, no le han sentado del todo bien. Algo entendible para un jugador que a pesar de demostrar estar entre los mejores del mundo, solo tiene 20 años.
Haaland volverá a marcar, incluso más de lo que venía haciendo, pero por el bien del Borussia debería empezar a hacerlo cuanto antes o sino, fuera de Europa, tendrán muy pocas armas para parar la subasta de Erling Halaand.