Kondogbia, Torreira y Herrera, en la recámara de Simeone
El equipo rojiblanco sólo suma dos victorias en los últimos ocho partidos, perdiendo fuerza en el medio. Entre los tres han jugado 201 minutos en ese periodo.
El centro del campo del Atlético se vio completamente superado por el del Chelsea. El equipo inglés situó sus líneas muy juntas, una presión muy alta y a Kanté y Kovacic en un doble pivote muy físico para evitar que nadie en el equipo rojiblanco pudiese girar y generar fútbol con comodidad. Koke y Saúl no consiguieron agarrar la pelota y la presión del Atlético fue ineficaz ante la buena salida de pelota de los londinenses.
En los últimos partidos, al Atlético le está costando hacerse fuerte en el medio. Probablemente en el derbi contra el Real Madrid fue cuando más dominio tuvo durante buena parte del encuentro y mejor tiró las líneas en la presión. En aquella ocasión Koke mandó desde el pivote con la colaboración de Llorente y Lemar a su lado, un esquema muy ofensivo pero potenciado por el trabajo de los dos interiores. Pero en el resto de partidos, a pesar de las victorias contra Villarreal y Athletic, ha costado mucho imponerse en la franja ancha del campo.
Y el Atlético ha encadenado malos resultados. Van únicamente dos victorias en los últimos ocho encuentros, lo que ha costado la eliminación de la Champions y ver al Barcelona y al Real Madrid cada vez más cercanos por el retrovisor. Koke no está al nivel brillante de la primera vuelta y Saúl no está pasando por una buena temporada. Lemar por su parte ha encadenado dos suplencias consecutivas probablemente acordes a su estado físico, entrenándose al margen por precaución en varias ocasiones.
Por estos motivos los Kondogbia, Torreira o Herrera esperan su oportunidad desde el banquillo. El primero fue ganando protagonismo, cuajó un fantástico partido contra el Celta, pero posteriormente frente al Levante falló en la jugada que acabó ocasionando el primer gol granota. En aquel encuentro tuvo una hora. Desde entonces, ha disputado 24 minutos en los últimos seis partidos (de 540 minutos). En el caso de Torreira, sus apariciones no son superiores. 71 minutos en esa racha fatídica de los últimos ocho encuentros (de 720’). Y Herrera no ha jugado absolutamente nada, aunque ha estado condicionado por el coronavirus, problemas musculares y su ausencia por motivos personales tras el fallecimiento de su madre.
La ausencia del mexicano se amplifica teniendo en cuenta que comenzó el curso ganándose un puesto en el once por su gran nivel junto a Koke en el doble pivote. Tras participar en 12 partidos, siete de ellos como titular, sufrió una lesión que unida a todos los problemas posteriores ha provocado que Herrera sólo haya jugado seis minutos en el año 2021. Pero el centrocampista quiere volver a ser importante, está preparado y busca ganarse minutos en los entrenamientos. Simeone tiene a tres centrocampistas naturales en la recámara para intentar recuperar la fortaleza perdida en el medio.