El Zaragoza pide modificar de nuevo el convenio de acreedores
La SAD solicitó el pasado viernes ante el juzgado que se amplíe el pago, con la misma quita del 60%, hasta 2030 y que se suspenda en caso de descenso a Segunda B.
El Real Zaragoza SAD presentó el pasado día 12 ante el Juzgado Mercantil nº 2 de Zaragoza una solicitud de modificación del actual convenio de acreedores para que el calendario de los pagos, que debía finalizar en 2025, se prolongue de forma lineal hasta 2030 -con la misma quita del 60%-, además de la posibilidad de su suspensión en el caso de descenso del equipo a Segunda División B. Esta solicitud se fundamenta en la Ley 3/2020 y tiene su base en los perjuicios derivados de la pandemia del COVID-19.
Se trata de la segunda modificación del convenio de acreedores, que se firmó en 2012 y que ya fue variado en 2016 para cambiar los años de cumplimiento alterno, que eran cinco, para que fueran fijos y consecutivos y empezar a pagar ese convenio de acreedores el 1 de julio de 2018. El Zaragoza sacó adelante esa solicitud al obtener una mayoría reforzada de adhesiones, más del 60%, pero para sacar adelante esta propuesta de modificación, adelantada por Media Aragón y confirmada por AS, la sociedad anónima deportiva ha solicitado que se tramite su aprobación exigiendo el mismo porcentaje que fue necesario para la aprobación del convenio y en virtud de la Ley 22/2003.
Por su parte, si el Zaragoza ascendiera a Primera División dentro de este nuevo calendario de pagos, se abonará anualmente y mientras se estuviera en la primera categoría del fútbol español un 20% más adicional a los acreedores ordinarios hasta acabar con los créditos, teniendo en cuenta que los pendientes de pago ascienden a 24,736 millones de euros.