Benito como moneda de cambio
El extremo de la Unión Deportiva Las Palmas no ha jugado este curso los 90 minutos del tirón. Ha sido titular 11 veces y siempre fue sustituido.
Siempre tuvo claras Pepe Mel las bondades que la forma de jugar de Benito Ramírez le aportaba a su idea de juego. En todo momento enalteció el entrenador madrileño el desborde pegado a la cal del extremo de La Aldea, así como los réditos de su golpeo lejano de balón. Nunca dejó de contar con él cuando estuvo sano, menos aún este curso. Sin embargo, el 11 de Las Palmas anda todavía buscando la necesaria regularidad en su juego, también contagiado por los vaivenes de su equipo.
Comenzó Benito la temporada con el lastre de su incierto futuro, pues empezó a rodar la pelota y su contrato permanecía vigente ‘solo’ hasta el 30 de junio de 2021. Además, una lesión en la espalda frenó en seco su trayectoria en octubre, lo que le supuso volver a empezar. Sin embargo, el día 19 de dicho mes el club oficializó su renovación y el futbolista pudo al fin soltar lastre. “Se dijo que no jugaba porque no había renovado pero era mentira; no lo hacía porque estaba lesionado en la espalda”, aseguró. De momento, su nuevo vínculo con la Unión Deportiva Las Palmas se amplió hasta el año 2024 (30 de junio), evidente muestra de su importancia capital en los despachos del club.
Fue cogiendo ritmo poco a poco, y no se ha perdido un solo partido desde la 9ª jornada (1-1 en Albacete), esta incluida, 19 en total. Sin embargo, Benito no termina de encontrarse del todo, pasando por ser una de principales las soluciones a la hora de variar el rumbo de los partidos en uno u otro sentido. Fue 11 veces titular, sustituido siempre, y en otras 8 ocasiones tuvo que esperar su oportunidad desde el banquillo, lo que se traduce en 918 minutos sobre el césped, el 11º de Las Palmas en dicha clasificación. Le superan en este orden, Álex Suárez (1.930), Lemos (1.496), Rober (1.481), Sergio Ruiz (1.433), Curbelo (1.311), Kirian (1.301), Valles (1.260), Dani Castellano (1.194), Loiodice (991) y Edu Espiau (935).
Lejos todavía de su mejor nivel, Benito no ha marcado esta temporada y apenas suma una asistencia de gol, lo que hace de él una de las principales monedas de cambio de la UD. Pese a sus actuales prestaciones, se mantiene como uno de los fijos para Pepe Mel. El domingo, ante el Sabadell (19.30 horas, Estadio Gran Canaria) tiene otra oportunidad de cambiar la tendencia.
