Copa, Messi y Vallecas
El argentino reaparecerá ante el Rayo en octavos de final. Para el Barça, la Copa es vital, a los vallecanos les queda LaLiga (21:00, Tele5/DAZN).
En otros tiempos, la presencia de Messi en una lista del Barça para jugar octavos de final ante un club de Segunda División hubiera sido remota. Ahora, dadas las circunstancias, es más que necesaria. Así que esta noche en Vallecas (21:00 horas Telecinco y DAZN) Messi vuelve para jugar la Copa (sigue el partido en directo en AS.com).
El argentino se ha perdido los dos últimos partidos del Barça a raíz de la tarjeta roja que vio en la final de la Supercopa de España en Sevilla ante el Athletic y el Barça, a pesar de que va sumando puntos con más fluidez, sigue muy lejos de poder disputar LaLiga. Así que, para los blaugrana no queda otra que aplicarse la receta que dio el siempre sincero Koeman en la rueda de prensa previa al partido: "La Copa es el camino más corto para ganar algo". Y dijo corto por no decir el único.
Así que el conjunto catalán no saldrá al césped de Vallecas, esté como esté tras las nevadas, las heladas y la lluvia, con un equipo de circunstancias. No es momento de templar gaitas y aunque el domingo visite el Camp Nou el Athletic Club, los cinco sentidos del equipo blaugrana están puestos en la Copa. Así que teniendo en cuenta las bajas por lesión (especialmente la recaída de Dest y que Sergi Roberto no llega a tiempo), el equipo no variará mucho del que jugó el domingo en LaLiga ante el Elche, con la excepción de Messi.
En el Rayo la situación, por paradójico que parezca, es diferente. El equipo de Iraola si tiene intereses muy serios en laLiga SmartBank. El domingo visita al líder Espanyol en un partido crucial, pero resulta que los madrileños tampoco tienen muchas piezas donde elegir. Entre lesionados y afectados por el COVID, las rotaciones son limitadas.
No obstante, Iraola ya demostró la pasada campaña con el Mirandés y esta misma ante el Elche con el Rayo que es un especialista en dar sorpresas en la Copa. Una sorpresa que el Barça no puede permitirse, por eso apela a Messi