El Mónaco agrava la crisis del Marsella
El conjunto de Kovac se antepuso al gol inicial de Radonjic y remontó en una gran segunda mitad, liderados por un Golovin que dio dos asistencias.
Una gran segunda mitad le valió al Mónaco para doblegar al Olympique de Marsella, un proyecto que no carbura y que parece que ya ha tocado fondo con André Villas-Boas. Los de Kovac se impusieron 3-1, anteponiéndose al gol inicial de Radonjic y agravaron la crisis de su rival, que suma tres derrotas consecutivas en la Ligue 1.
Ante las necesidades del equipo, André Villas-Boas introdujo varias novedades en el Louis II. El OM salió con Balerdi de mediocentro defensivo y con Radonjic de extremo izquierdo, sentando a un Payet muy criticado durante las últimas semanas. El flamante fichaje Milik esperaba su oportunidad en el banquillo tras fichar el jueves por el conjunto marsellés. Por su parte, Kovac repitió el sistema de tres centrales que tan bien le había funcionado la semana pasada en Montpellier.
El Marsella realizó una primera parte brillante en Mónaco. No concedió ocasiones claras, replegó durante 45 minutos sin fisuras y aprovechó la única ocasión que tuvo. Radonjic recibió un espectacular pase en largo de su compatriota Caleta-Car y el extremo no perdonó ante Lecomte tras anticiparse a la indecisión entre Maripán y Sidibé en la banda derecha. Con el 0-1, el OM llevó el partido a su terreno, Balerdi y Gueye sostuvieron en el centro del campo y, salvo un disparo de Volland en la frontal que atrapó Mandanda, el Mónaco no inquietó la portería del internacional francés.
En la segunda mitad, el Mónaco salió como una avalancha sobre su rival. Kovac metió a Golovin por Aguilar para tener una referencia más en ataque y el equipo lo notó de inmediato. El ruso asistió a Maripán en un córner nada más salir del túnel de vestuarios y los monegascos empataron un partido que tenían muy en contra en el primer acto. Minutos después, Mandanda realizó la parada de la noche en un disparo con la pierna izquierda de Ben Yedder en la frontal, en lo que fueron cinco minutos de sometimiento de los locales a un Marsella que no hizo acto de presencia prácticamente.
Villas-Boas, obligado a reaccionar, dio entrada a Milik por Benedetto. El polaco debutaba con el Marsella tras otro partido bastante dubitativo del delantero argentino, que no disparó durante 60 minutos y se vio muy superado por Maripán. El Mónaco volvió a aprovechar el balón parado para certificar su remontada, esta vez a través de Tchouameni, que se anticipó a una mala salida de Mandanda en el punto de penalti. Los de Kovac ya han marcado seis goles de córner en 2021, es decir, el 50 % de sus goles llegaron a balón parado. Jovetic cerró la cuenta con un golazo de falta al final.