Puskas Stadium, una obra de 610 millones para la Eurocopa
Ubicado en el anterior estadio del mismo nombre, se inauguró en 2019 y tiene capacidad para 67.150 espectadores. Sus costes se triplicaron.
En la parte trasera de la gigantesca estación de trenes Budapest Keleti asoma el Puskas Stadium, la obra que se inauguró en 2019 y que este verano será una de las sedes de la Eurocopa de Fútbol. Antes, esta misma noche, el Barcelona se mide al Ferencvaros para certificar la primera plaza de la fase de grupos, lo que le daría el factor campo en los octavos de final. Un estadio moderno, con capacidad para de 67.150 espectadores y con historia.
El estadio es la joya de la corona del presidente del país, Viktor Orban, que ha apostado por grandes obras deportivas en la ciudad que tienen en común el sobreprecio, aunque están acondicionadas para albergar eventos de máximo nivel. Un ejemplo, antes que el Puskas Stadium, es la piscina Duna Arena. "Es la mejor del mundo", explica el arquitecto Quim Pujol. Pese a ello, la magnánima obra, que ha albergado un Mundial de Natación, superó el presupuesto inicial.
Lo mismo ha ocurrido con el Puskas Stadium, que finalmente ha costado 610 millones, según las estimaciones de la prensa húngara y de lo que publicaron en su día los constructores. Eso supone pagar más dinero que el Allianz de Munich o el Emiratos de Londres, donde juega sus partidos el Arsenal. Según la empresa constructora, el mayor desafío fue montar la cubierta, pues se tuvo que construir una grúa especial y una carrertera para que pudiera soportar el peso de esta estructura.
El estadio sustituye al anterior, del mismo nombre y obsoleto. Hacía 63 años que Hungría no construía un nuevo recinto de fútbol en una ciudad que respira deporte. Y, ahora, podrán disfrutar en la Eurocopa de su selección y de las maravillas de su nuevo estadio.