Osasuna como trauma

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El pasado 16 de julio, Osasuna fue el último visitante del Camp Nou de LaLiga 19-20. Pese a quedarse con diez jugadores, el equipo navarro se impuso por 1-2 y esa victoria navarra coronó al Real Madrid como campeón matemático. Tras el partido, Messi desataba una tormenta que adelantaba lo que iba a pasar después al declarar: "Ha quedado claro que tienen que cambiar muchas cosas, no nos da ni para ganar LaLiga". Cuatro meses después, Osasuna regresa al lugar del crimen (Camp Nou 14:00. Movistar LaLiga) para encontrarse a un Barcelona sumido en dudas (sigue el partido en directo en AS.com). Si a eso le sumamos que el Barça falló en su visita a Pamplona, podemos deducir que el equipo culé se enfrenta a un trauma.

Por si fuera poco, Barcelona y Osasuna llegan al duelo empatados a once puntos después de haberse jugado oficialmente diez jornadas, aunque los barcelonistas únicamente han disputado ocho partidos, uno menos que los navarros.

Ambos equipos están tres puntos por encima del descenso que marca el Levante. Una trayectoria que contrasta con la marcha del equipo blaugrana en la Champions, donde este martes certificó en Ucrania su clasificación matemática para los octavos de final. Si la situación en Europa es idílica, en el campeonato doméstico el conjunto de Koeman no puede permitirse ni un tropiezo más después de haber ganado cinco puntos sobre los últimos 18 posibles.

Acosado por las lesiones, Koeman no tiene mucho dónde elegir. Recupera a Busquets, pero las molestias de Sergiño Dest vuelven a sembrar de dudas lo que respecta a la defensa, donde Lenglet sigue siendo el único central disponible. Mingueza, que tan bien cumplió en Kiev jugará seguro, falta ver dónde.

En Osasuna las bajas también son de consideración. A las ya conocidas se han sumado esta semana la de Adrián, con una lesión en el gemelo, y la de David García, en cuarentena por contacto con un positivo en coronavirus.