Miranda también conquista China y acaba con otra hegemonía
El que fuera central del Atlético y clave en cinco títulos rojiblancos, ha ayudado al Jiangsu Suning a romper la superioridad del Guangzhou Evergrande.
Casi nueve años han pasado ya desde aquel “¡Miranda, el balón a la mierda!” con el que Simeone bautizó al central brasileño en uno de sus primeros entrenamientos al frente del Atlético. Se convertiría después en una pieza vital y en un personaje que se ganó por derecho propio que su nombre aparezca en el libro de historia del Atlético. Pero de primeras el Cholo le hizo entrar en razón para que se sacudiera los prejuicios y fuera expeditivo. Seguro que lo ha recordado, porque su carrera cambió para bien al lado del Cholo y al lado de Godín, por su puesto. A sus 36 años, Miranda viene de liderar al Jiangsu Suning el equipo que le ha quitado la Superliga china al poderoso Guangzhou Evergrande de Cannavaro, que había ganado ocho de los últimos nueve campeonatos. Hasta el jueves.
El Jiangsu, con João Miranda como jefe, se impuso en el partido de vuelta de la final por 1-2, tras el 0-0 de la ida. Es el quinto título liguero de la carrera del defensa brasileño tras tres en Brasil con Sao Paulo, el histórico de 2014 con el Atlético más este. Si con el club colchonero ayudó de forma definitiva a romper la hegemonía del Real Madrid sobre el equipo rojiblanco, en China no se le ha olvidado dotar al grupo de ese carácter. Miranda siempre recuerda que aquel cabezazo en el Bernabéu de 2013 que le dio la Copa del Rey al Atlético es el gol más importante de su carrera, ya que era romper una racha de 14 años sin ganar al eterno rival. Como rojiblanco levantó esa Copa, la Liga, la Supercopa Española, la Europea y una Europa League. Formó junto a Godín una pareja ya mítica y, después, se mudó a Italia con el beneplácito de Simeone. Fue el propio técnico el que aconsejó al futbolista para que eligiera el Inter en 2015. Tras su ciclo lombardo se embarcó en la aventura china, pero no ha ido de vacaciones. Lo ha jugado prácticamente todo en el presente ejercicio, formando con Wakaso y Eder el pasillo de seguridad del campeón.
Se vuelve de Asia siendo campeón, al menos esa es la intención. Falta por jugar la Copa, pero su club, ante la situación de pandemia, ha decidido liberar los futbolistas extranjeros. Miranda estaba en China sin su familia y ha relatado las dificultades en estos tiempos. "Mi pensamiento es volver a Brasil. Estos cinco meses sin la familia fueron muy duros. Hace cinco meses que no veo a mi esposa e hijos", afirma en Yahoo. "Suning seguirá jugando la Copa china, pero a los extranjeros se nos ha permitido volver a nuestros países, entre otras cosas porque el objetivo de la temporada ya se había alcanzado con la llegada a la final. La idea era clasificarse para la Champions League, pero hemos conseguido incluso más", explica. Miranda apura su carrera, su próximo destino puede volver a ser Brasil, pero en Asia también ha dejado huella.