El Mónaco se impone en el derbi contra el Niza
El conjunto monegasco sumó su segunda victoria consecutiva tras imponerse por 1-2 a un Niza que pagó los errores defensivos y fue incapaz de darle la vuelta al marcador.
Con goles de Disasi y Diop, el Mónaco se llevó el derbi de la Costa Azul y certificó su segunda victoria consecutiva en la Ligue 1. El equipo que entrena Niko Kovac fue muy superior a su rival y acabó aprovechando las concesiones defensivas de los de Patrick Vieira. La victoria supone una inyección moral para el Mónaco, que ya tiene a dos puntos los puestos de acceso a la Champions League.
Un derbi siempre es un partido especial, más si cabe si es un derbi de la Costa Azul. Niza y Mónaco se batían en un partido decisivo por el devenir de los puestos europeos en la Ligue 1 y tanto Vieira como Kovac no se reservaron nada. La baja de Dante condicionaba a los locales, y es por ello por lo que el exjugador del Arsenal colocó a Schneiderlin de central, para intentar corregir los errores defensivos de las últimas semanas. Por su parte, Kovac repetía la alineación que había vencido al Burdeos por 4-0 al Mónaco la semana pasada, con la única novedad de Mannone en la portería.
La primera parte entre ambos equipos fue la confirmación de que el Mónaco va en línea ascendente. Quizá el resultado se quedó corto, ya que el 0-1 no reflejó realmente la superioridad monegasca sobre un Niza que sigue dejando muchas dudas en cuanto a juego se refiere. Antes del gol de Disasi, el Mónaco disparó seis veces a puerta en apenas 10 minutos, machacando con Ben Yedder y Volland la espalda de Thuram en el centro del campo. De no ser por Walter Benítez, las águilas podrían haberse ido al descanso con dos o tres goles en contra.
Además de tener mecanismos muy trabajados en ataque, el Mónaco de Kovac es uno de los equipos que más peligro generan a balón parado de toda la Ligue 1. Disasi y Badiashile, sus dos centrales, son dos jugadores muy poderosos en el juego aéreo y ya le han dado cuatro goles a su equipo esta temporada. Sería Disasi el que aprovechara un buen córner botado por Fofana para adelantar a su equipo en el Derbi. El Mónaco siguió atacando y Benítez salvó un uno contra uno con Gelson Martins y, aunque Vieira cambió el sistema de tres centrales para intentar tener un efectivo más en el centro del campo, el resultado no tuvo el efecto deseado por el técnico.
Con un Mónaco más replegado, Vieira introdujo variaciones que tampoco le dieron resultado. Ni la entrada de Pelmard de central para devolver a Schneiderlin a su posición habitual fueron suficientes para el Niza, que volvió a conceder un regalo defensivo que acabó en gol. Nsoki, que ya había tenido un error flagrante en la primera mitad en salida de balón, le regaló un balón a Diop en la frontal del área que el canterano del Mónaco no perdonó. Fue la última concesión defensiva de un Niza superado durante prácticamente todo el partido.
La última modificación de Vieira en el banquillo, colocando a Gouiri de 9 para quitarle de la banda izquierda, sí tuvo sus efectos en el partido. El Mónaco había retrocedido muchos metros tras el 0-2 y el franco-argelino generó el 1-2 del Niza. Mannone, portero titular hoy por la lesión de Lecomte, no blocó bien un disparo sin aparente peligro de Lotomba que aprovecharía Lees-Melou en el punto de penalti. Geubbels tuvo el tercero tras una gran jugada de Ben Yedder, pero su disparo se estrelló en el poste. El Mónaco acabó con Sidibé de extremo para aguantar el resultado y lo consiguió sin excesivo sufrimiento y con la ayuda del Niza, incapaz de generar peligro durante prácticamente los 90 minutos.