El 1x1 del Barça: debacle de Griezmann, Dembélé y De Jong
El 'Principito' falló un gol cantado, el extremo perdió 14 balones en la primera parte y el holandés cometió un penalti de infantil. Messi tampoco fue decisivo esta vez.
Ronald Koeman movió fichas seriamente por primera vez desde que empezó la temporada. Con mal resultado. Dembélé y Pedri dejaron en el banquillo a Ansu y Coutinho, y Dest debutó como titular como lateral izquierdo. Lenglet mantuvo su puesto en el once después de cumplir sanción ante el Sevilla. Alineado con un 4-2-3-1, y claramente de más a menos, este fue el uno a uno del Barça en Getafe.
Neto: Va a más. Ocupa más espacio en el área que Ter Stegen y eso es una ventaja en el juego aéreo de los rivales, Con el pie no se complica. Fiable, resolvió sin problemas una llegada de Arambarri en la primera parte. En el penalti no adivinó el tiro de Jaime Mata. Luego le hizo un paradón al Cucho.
Sergi Roberto. Dejó alguna rejilla en la primera parte para que entrase por ahí Cucurella, que hizo un partidazo. Tuvo sus más y sus menos con el canterano. En ataque siempre es un jugador correcto. Aprobado, sin más.
Piqué. Condicionado por una amarilla en un salto con el Cucho en el que no pareció cometer ninguna infracción. Intentó empujar al equipo en la segunda parte, llevando el balón hacia arriba, incorporándose en transiciones. Estuvo a la altura en un equipo que no dio el nivel. De los pocos que demostró orgullo.
Lenglet. Sufre en cuanto hay metros a su espalda, pero cumplió dentro del nivel bajo del equipo a partir del descanso. Tuvo una pérdida final que le dejó en evidencia pero los centrales no fueron el problema del Barça en Getafe.
Dest. Empezó intranquilo, pero se soltó y, pese a no jugar en su mejor banda, participó en la acción del tiro al palo de Messi en la primera parte. Acabó como carrilero derecho. Es intenso, pero poco preciso con el balón. Debe progresar mucho.
Busquets. Ha comenzado a buen tono la temporada. Bien colocado, tal vez jugar con un pivote y no sentirse tan vulnerable le ha ayudado. Muy fiable en la entrega, está jugando con concentración y más tranquilo por protegido. Él da el nivel. De Jong, no.
De Jong. Su partido se define en la acción del penalti. Infantil. Un jugador que, de momento ha pasado de ilusión a fiasco. Decepcionante y absolutamente intranscendente, necesita un cambio. O una buena ración de banquillo.
Pedri. Da alegría verlo jugar al fútbol. Tan fácil y con tanta valentía pese a su aparente fragilidad a sus 17 años. Un niño maravilla que tiene un don. Le dio un balón maravilloso a Griezmann que el francés mandó a las nubes. Se diluyó en la segunda parte y fue sustituido.
Messi. Esta vez empezó por la derecha, algo que tal vez sorprendió a Bordalás. Koeman quiso dejar sin referencia a los centrales del Getafe y evitar que el argentino les tuviese que soportar de espaldas. Pudo marcar dos goles (un balón al palo y un tiro en el último minuto) pero en la segunda parte desapareció. Hay que exigirle más.
Dembélé. Un marciano en el campo. En la primera parte, ya había perdido 14 balones. Koeman le dio una hora y acabó, como tantos entrenadores, cansado de él. Como se ha escrito antes, su problema, más allá de las lesiones, es que no toma buenas decisiones en el campo. Sólo tiene un rol posible, y es el de especialista para intentar ayudar cuando haya espacio por delante y en las últimas medias horas.
Griezmann. Un delantero de 120 millones de euros no puede tirar a las nubes un regalo como el que le mandó con lazo Pedri. No entra en contacto con el balón nunca. Si cuando ven sus desmarques, él falla los goles, igual no debería alzar la voz cuando va a Francia.
Ansu Fati. Fallón. No fue desequilibrante y Nyom le sacó de quicio con sus feas artimañas. Ha bajado desde los partidos del Villarreal y Vigo. Tal vez, demasiado azúcar.
Coutinho. Intentó llevar la manija cuando salió al campo. Se notó su presencia, pero no fue suficiente. Debe prodigarse más en el disparo a puerta.
Trincao. Va de más a menos. Intranscendente, falló un cambio de orientación fácil y se lió varias veces con el balón. Otro que no ha mantenido el nivel.
Braithwaite. Le dio cierta mordiente al ataque del Barça. Al menos, provoca que pasen cosas. Le falta un toque de calidad y brillantez pero un equipo en el que los jugadores tienen miedo a pisar el área, por lo menos alborota.
Riqui Puig. Testimonial aparición de diez minutos. Quiso tener relevancia en el juego pero no le dio tiempo a entrar en calor.