Vadillo: el fichaje perico que llega del Celta y pudo ser rayista
El extremo estuvo a punto de aterrizar en Vallecas el verano de 2015. Pasó el reconocimiento, pero el fichaje se frustró por las diferencias entre Rayo y Betis sobre la opción de recompra.
La llegada de Álvaro Vadillo echó el cierre definitivo al mercado del Espanyol, después de un verano un tanto extraño... Felipe Miñambres fichó al extremo para el Celta y, sin haber ni tan siquiera debutado, se marchó cedido al conjunto catalán. Lo más curioso es que ésta no era la primera vez que Felipe lo fichaba o, al menos, no es la primera vez que lo intentaba. Este último refuerzo perico pudo ser jugador del Rayo en verano de 2015.
Por entonces, Vadillo vestía la camiseta del Betis, aunque las lesiones le habían impedido tener protagonismo. De ahí que el club bético viese con buenos ojos la desvinculación del fútbolista para poner rumbo a Vallecas. Eso sí, reservándose una opción de recompra y un porcentaje en una hipotética venta futura. A finales de agosto de 2015, la operación se encontraba tan avanzada que el extremo viajó a Madrid para pasar el pertinente reconocimiento médico.
Pero no hay mejor ejemplo de fichaje frustado que éste. ¿El motivo de la discordia? Las cláusulas que la entidad andaluza quería introducir. Así lo manifestó el mismo presidente del Rayo en la presentación de Javi Guerra y Pablo Hernández. "Vadillo quería venir, pero el Betis no aceptó nuestras condiciones", zanjó Raúl Martín Presa, después de que surgieran los rumores de que las rodillas del jugador podrían no haber recibido el visto bueno de los servicios médicos franjirrojos.
También el futbolista quiso incidir en que su fichaje no cristalizó por las diferencias entre los clubes a la hora de abordar las condiciones. "Ha habido especulaciones con la rodilla, pero el presidente del Rayo dejó muy claro que los motivos fueron contractuales. Hizo bien en aclararlo y se lo agradezco", confesó el extremo en Diario de Sevilla, mientras confirmaba que se trataba, en concreto, de la opción de recompra: "Por eso las cosas no fueron bien".
Después de esas idas y venidas, Vadillo se reincorporó a la disciplina del Betis, equipo con el que había conseguido el ascenso en la 2014-15. Sin embargo, esa temporada 15-16 apenas jugó 88 minutos en Primera División. Por lo que hizo las maletas para firmar por el Huesca (16-18, volvió a subir a la máxima categoría en su segunda campaña) y por el Granada (18-20, ascendiendo en su primer año como nazarí). Este domingo se citan en Vallecas lo que fue y lo que pudo haber sido...