El Levante tiene dos semanas para acelerar la operación salida
El club deberá hacer hueco esta semana para que uno de los fichajes, Malsa, pueda jugar el próximo domingo, a las 12:00, ante Osasuna.
El Levante tiene dos semanas para dar salida a su excedente de plantilla. El grupo que está a las órdenes de Paco López es demasiado grande en número y también excede el máximo de FPF que tiene la plantilla. Por lo que la secretaría técnica tiene trabajo por delante antes de que se cierre el mercado el próximo 5 de octubre. Porque además hay fichajes que todavía no han podido ser inscrito debido a que el margen salarial del equipo está agotado.
Lo más urgente será precisamente esto. Malsa aún no ha sido inscrito y Paco López espera a que esta semana salga alguien para poder inscribirlo en LaLiga y poder contar con él para el duelo del próximo domingo, a las 12:00 horas, contra el Osasuna, en El Sadar. Si el que saliera fuera Antonio Luna, habría margen para inscribir a Malsa ya que liberaría 1,4 millones. Sin embargo, el lateral no está poniendo fácil su salida y la cosa está complicada.
Así que las miradas se centran en los canteranos Cárdenas, Manzanara y Arturo Molina. Los tres tienen opciones de Segunda y el club les apremia para encuentren acomodo, bien cedidos o bien traspasados definitivamente, y liberen algo de margen financiero. Doukouré no será inscrito ya que está lesionado del tendón de Aquiles pero esto no rebajará el FPF. Asimismo, hay dos futbolistas, Hernani y Sergio León, a los que el club no les cerraría la puerta si encuentran una salida que les agrade. Aunque, de momento, no existen estas opciones.