El Bayern quiere más
Los bávaros se enfrentan al Lyon en la semifnal de la Champions con unos números de récords: lleva 39 goles en 9 partidos en esta edición.
La bestia busca su próxima presa. Cinco días después de descuartizar, deshonrar y enterrar al Barcelona del presente, la fiera muniquesa ya ha digerido los ocho chicharros que endosó a los de Setién y vuelve a estar hambrienta. El depredador comandado por Hansi Flick anda desatado y ahora enseña los dientes a un Lyon que, a pesar de eliminar a Pep, no llega a intimidar a un equipo que está hecho para destruir rivales con una crueldad que da verdadero miedo. Desde la concentración del campeón de la Bundesliga tiran por lo bajo. Lo del Barça ya es historia y no vale para nada, dicen. Suena a silencio de felino antes de lanzarse a por su siguiente víctima (sigue el partido en directo en As.com).
Las cifras no mienten y Rudi García, técnico del Lyon, preferirá restarles importancia. Lo del Bayern de Flick en Europa es lo nunca visto. Nueve victorias de nueve en lo que va de Champions. 24 goles a favor en fase de grupos más 15 en las tres eliminatorias disputadas hasta la fecha. Goleadas incontables como el 2-7 frente al Tottenham, el 7-1 de global ante el Chelsea y, cómo no, el histórico 8-2 que le ha servido para hacer escombros de Can Barça. No cambiará ninguna pieza el míster de su arma de destrucción masiva frente al Lyon. Estarán todos los quilates sobre el verde, desde el puñal Davies hasta el cañón Lewandowski.
Lo que juega a favor del Lyon es el partido contra el City. Puso a prueba el séptimo clasificado de la Ligue1 que sabe cómo contener a un equipo que se basa en la posesión para, después, ser letal arriba. Eso sí, queda por ver cómo asimilará la presión asfixiante a la que el Bayern somete a sus rivales. Cada pérdida en las inmediaciones del área es consecuencias fatales. Sin embargo, la puesta en escena de los alemanes ofrece espacios. Las veces que el Barça llegó con peligro al marco de Neuer fue con balones a la espalda de Alaba y Boateng. Es el talón de Aquiles de una bestia que busca su segundo triplete después de 2013.