Avilés, con dorsal del primer equipo, doble reto en el Leganés
El canterano ya no puede ocupar ficha del filial, ni subir y bajar desde el B al primer equipo. Supone más presión para convencer a Martí. Lucirá el 14.
Dejó el final de la pasada temporada pocos titulares que invitaran al optimismo en el Leganés. Javier Avilés es uno de ellos. El joven extremo (22 años) llevaba dos cursos llamando a la puerta del primer equipo, pero fue el periodo post-pandemia el que le ofreció la oportunidad de mostrar regularidad (e incluso gol) con los mayores. Buen final de campeonato que le permitió ganarse una renovación hasta 2024, la ocasión de probar en la actual pretemporada y un detalle nada simbólico: un dorsal del primer equipo.
El madrileño está entrenando estos días luciendo el número 14 en las prendas con las que trabaja en cada sesión. Sucede que el próximo lunes cumplirá 23 años, con lo que el club ya no puede darle dorsal del filial para la pretemporada. Las fichas que oficialmente computan como jugadores del Lega B (dorsales del 26 en adelante) deben pertenece a futbolistas con menos de 23 años. A partir de esa edad, sólo pueden ocupar ficha con los mayores y también un dorsal de la primera plantilla (del 1 al 25).
Así que la situación es, para Avilés, más exigente que nunca. Esto es: o puerta grande (quedarse en el primer equipo) o salida en el mercado estival. La alternativa de usarlo en el ascensor entre el primer equipo y el filial no es ya factible. Sucede, además, que el contrato que firmó antes de la reanudación del campeonato obligaba a darle trato de jugador de la primera plantilla o, en caso contrario, quedaba libre.
El caso, sea como fuere, es que por primera vez desde que llegó a Leganés, Avilés tiene perspectivas reales de poder quedarse como pepinero de pleno derecho, aunque la competencia se le antoja alta y, de lo que suceda en la pretemporada, podría depender que siguiera o no. Dani Ojeda y José Arnáiz son, por ahora, sus ‘rivales’, aunque habrá más. El Leganés busca hombres de banda.
Entre tanto, el autor de uno de los goles más espectaculares de la temporada pasada (golazo a Osasuna), sigue ejercitándosecon la mente puesta en aprovechar la ocasión que se le está brindando, convencer a Martí y hacerlo con un dorsal (el 14) que es el doble del que a él le gusta (el 7) quizá como una invocación aritmética al crecimiento que aspira conseguir en este verano clave en su carrera profesional.